Cuatro bomberos y dos responsables de un gimnasio de Reus (Tarragona) declaran por incitación al odio contra la Policía
Segunda jornada de interrogatorios en el juzgado de instrucción 2 de Reus (Tarragona). Este jueves fue el turno del alcalde y de los concejales independentistas, y este viernes cuatro bomberos y dos responsables de un gimnasio de la localidad han declarado por un presunto por un presunto delito de incitación al odio contra la Policía Nacional por las protestas contra la presencia de los agentes en el municipio.
Fuentes judiciales han informado que los responsables del gimnasio han negado el presunto delito de incitación al odio. La Policía les denunció por este delito por supuestamente haber echado del gimnasio a un grupo de agentes.
Los imputados han explicado que varios clientes, al saber que agentes se entrenaban en el gimnasio, advirtieron de que se darían de baja, y que, tras hablar con los policías, llegaron a un acuerdo con los agentes para devolverles las cuotas, por lo que en ningún caso se les vetó ni echó.
Los bomberos, además de por el delito de incitación al odio, están imputados por malversación por supuestamente haber usado material del cuartel en las manifestaciones frente al Hotel Gaudí de Reus para pedir que los agentes se marcharan del pueblo.
El alcalde de Reus, Carles Pellicer (PDeCAT), defendió este jueves ante la jueza que el manifiesto contra la presencia policial en el municipio que firmaron los concejales de su grupo, ERC, AraReus y la CUP buscaba “recuperar la convivencia” y “tranquilizar” a la población tras las cargas del 1-O.