Convergència tiene más vidas que un gato. El centro derecha nacionalista catalán ha sufrido su peor resultado en unas generales en 37 años y ha igualado los ocho escaños que obtuvo el pasado 20 de diciembre y en 1979. No obstante, el partido se ha sobrepuesto a las malas encuestas de la campaña y de la misma noche electoral (el sondeo a pie de urna de TV3 le daba 5 escaños). De esta forma, CDC afronta con mejor ánimo del previsto sus dos próximos retos: el congreso de refundación que celebrará entre el 8 y 10 de julio y, en especial, la cuestión de confianza a la que el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, se someterá en septiembre.
Desde Convergència habían planteado las elecciones como un examen a los seis meses de Puigdemont en la Generalitat. El líder de CDC, Artur Mas, había avisado que el liderazgo de Puigdemont quedaría “debilitado” si este domingo no se reforzaba electoralmente a CDC.
Pese a que el partido ha salvado los muebles en diputados, Convergència sigue retrocediendo en votos en el área metropolitana de Barcelona, el principal granero de sufragios catalán. En el conjunto de la provincia, además, Convergència se mantiene en penúltimo lugar –el PP le ha ganado por 30.000 votos, mientras que C's le superó el 20D–. Por otro lado, en las provincias de Girona y Leida, ERC ha superado a Convergència por primera vez y le ha arrebatado el primer lugar.
“Vistos los pronósticos, el resultado nos deja un regusto positivo”, ha reconocido el cabeza de lista de Convergència, Francesc Homs, que ha encarado sus palabras hacia el congreso de refundación del partido y a la trascendental cuestión de confianza, que determinará si se celebran las cuartas elecciones catalanas en siete años: “Ponemos nuestra capacidad de resistencia al servicio del país y al servicio de la nueva fuerza política que nacerá de Convergència”, ha zanjado Homs.
Por su lado, el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha valorado que con el mal resultado de Unidos Podemos “el referéndum no goza de buena salud”. “España sigue apostando por más de lo mismo”, ha lamentado. Igual que su vicepresident, el republicano Oriol Junqueras, Puigdemont ha instado a los partidarios del derecho a decidir a escoger entre “el más de lo mismo” estatal o “el país movilizado para construir un estado independiente”.
Aunque la suma de ERC y CDC ha mantenido resultados, Mas no ha podido evitar lanzar otro ataque a los republicanos, como viene haciendo toda la campaña. “Si ha ganado una vez más En Comú Podem ha sido porque los soberanistas no han ido unidos”, ha reprochado el expresident a Junqueras. Mas ha optado por atacar a sus compañeros de Govern aunque los independentistas han resistido a los buenos resultados que las encuestas otorgaban a En Comú Podem, que ha vuelto a ganar las generales en Catalunya con los mismos doce escaños que el 20D.