El president de la Generalitat, Quim Torra ha firmado este martes el decreto de nombramiento de los nuevos consellers en sustitución de Jordi Turull y Josep Rull, encarcelados en Estremera, y Toni Comín y Lluís Puig, que permanecen en Bélgica. Torra rectifica su primera propuesta de hace diez días, que el Gobierno rechazó hacer efectiva por figurar entre los nuevos consellers presos y huidos, e intenta así poner fin al bloqueo político y levantar la aplicación del 155, vigente desde hace más de siete meses.
Por el lado de JxCat, Elsa Artadi, inicialmente destinada a Empresa, asumirá la cartera de Presidencia que ocupaba Turull. La sustituta de Artadi será Àngels Chacón. Cultura pasará de Lluís Puig a la diputada Laurà Borràs, directora de la institución de las letras catalanas la pasada legislatura. Y en Territorio, el sustituto de Rull será su número dos en la conselleria durante el mandato anterior, Damià Calvet.
La republicana Alba Vergès tomará el relieve de Toni Comín Salud. La actual secretaria cuarta de la Mesa del Parlament presidió la comisión de Salud la pasada legislatura. Fuentes de los partidos independentistas no han no descartado incluso que el Govern pueda tomar posesión este próximo sábado. Antes sería imposible porque dos de sus integrantes, Ester Capella (Justicia) y Teresa Jordà (Agricultura), son todavía diputadas de ERC en el Congreso y este jueves y viernes tienen que estar en Madrid para asistir al debate de la moción de censura presentada por Pedro Sánchez.
La elección de los nuevos nombres favorece la presencia de más mujeres en el Consell Executiu. Entre los 13 integrantes designados inicialmente por Torra solo tres eran mujeres. En el nuevo Govern, la paridad será casi total: seis conselleres por siete consellers. De esta manera, también se busca frenar las críticas que tanto Torra como los partidos independentistas se han ganado por la falta de paridad del Ejecutivo catalán.
Los exconsellers se sienten “legítimos”
Pese a que no repetirán en el cargo, los exconsellers encarcelados y huidos han enviado un mensaje a Torra en el que le muestran su confianza y le piden que las instituciones catalanas “se vuelvan a poner al servicio del pueblo de Catalunya”, ha informado la Generalitat. Turull, Rull, Puig y Comín, que permanecen en Bélgica, han asegurado que entienden su nombramiento “como una cuestión de confianza” del president. Han manifestado además que se sienten “consellers legítimos” del Govern.
Uno de los consellers que se había mostrado más reacio a dejar paso es el republicano Toni Comín. De momento ya ha renunciado a la delegación de voto en el Parlament, una petición que su partido le hizo hace semanas pero que no se ha consumado hasta este martes. Comín seguirá manteniendo su acta de diputado, una decisión que ha sido duramente criticada por Ciudadanos y el PSC por entender que se aferra al escaño solo para poder percibir el sueldo.
¿Fin del bloqueo?
Pese a que los servicios jurídicos de la Generalitat habían dejado claro que el Gobierno de Mariano Rajoy debería publicar el nombramiento de todos los consellers elegidos por Quim Torra, también los que están en la cárcel o en el extranjero, el Ejecutivo del PP no piensa hacerlo. Así lo ha trasalado en una carta este mismo martes el secretario de Estado para las Administraciones Territoriales, Roberto Bermúdez de Castro, al secretario del Govern, Víctor Cullel.
Torra ha tomado la iniciativa para acabar con el escenario de un bloqueo sine die, por más que se insista en que la publicación de los nombres de los consellers en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGC) sea un “acto debido”, es decir, de obligado cumplimiento por parte del Gobierno central, que es quien en aplicación del artículo 155 lo controla ahora.
De hecho, en su misiva, Bermúdez de Castro ha recordado que el Gobierno, 155 mediante, puede realizar un “auténtico” control de legalidad de los actos de la Generalitat antes de publicarlos en el DOGC. Y una vez hecho este examen, el Gobierno concluye que nombrar consellers a Comín y Puig, que permanecen en Bélgica, y Rull y Turull, encerrados en Estremera, “no es válido ni eficaz”. Por lo tanto, el Ejecutivo no permitirá la “restitución” prometida por JxCat.
Ahora sólo falta que el Gobierno publique el nuevo Govern en el DOGC. Una vez tome posesión, la Generalitat ya ha anunciado que el primer acuerdo del Govern Torra será querellarse contra Mariano Rajoy por impedir el nombramiento de los presos y huidos.