El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha dado la razón al Ministerio de Exteriores y ha anulado el decreto por el que la Generalitat aprobó la reapertura de sus delegaciones exteriores en EE. UU., Reino Unido e Irlanda, Francia y Suiza, Alemania e Italia. En su sentencia, los magistrados de lo Contencioso Administrativo del TSJC constatan la “palmaria vulneración” de la normativa en que incurrió la Generalitat cuando aprobó el decreto por el que restituía las denominadas 'embajadas catalanas', por lo que proceden a su anulación.
En concreto, los magistrados señalan que la Generalitat publicó el 26 junio de 2018 el decreto de reapertura de sus delegaciones –cerradas por la aplicación del 155– sin esperar a los informes necesarios del Ministerio de Exteriores y del de Hacienda. La Generalitat solo envió un correo electrónico al Ministerio de Exteriores un día antes de aprobar el decreto, en el que comunicaba que en la reunión semanal del Govern se iba a dar luz verde a la reapertura de delegaciones.
Desde Exteriores contestaron que no se podían aprobar las delegaciones sin contar, en el plazo de 10 días, con los informes perceptivos de ambos Ministerios, pero la Generalitat siguió adelante, algo que el TSJC reitera en dos ocasiones que supone una “palmaria vulneración” de la ley de Acción Exterior.
Al constatar que la Generalitat incumplió las normas administrativas básicas para reabrir sus delegaciones, los magistrados rechazan pronunciarse sobre los “restantes motivos” que adujo Exteriores para pedir el cierre de las oficinas exteriores del Govern. Entre estos motivos figuraba la información confidencial que los delegados de la Generalitat intercambiaban con la conselleria de Exteriores y que el Ministerio aportó a la causa en el TSJC, tal y como adelantó eldiario.es.
De esta forma, los magistrados aducen razones meramente formales para anular la reapertura de delegaciones catalanas en el exterior, sin entrar en los contenidos políticos que introdujo en la causa el Ministerio cuando estaba dirigido por Josep Borrell.
Fuentes de la conselleria de Exteriores del Govern, que lidera el republicano Alfred Bosch, han restado importancia a la sentencia y han recordado que el decreto ahora anulado de 2018 fue sustituido por otro de septiembre de 2019. A criterio de la conselleria, la norma anulada “quedo derogada” por el nuevo decreto de 2019, por lo que las delegaciones de la Generalitat en EE. UU., Franca, Suiza, Alemania, Italia y Reino Unido e Irlanda “pueden funcionar con normalidad”.