TV3 y los medios públicos de la Corporación Catalana (CCMA) son desde hace años objeto de constante debate político. En este inicio de legislatura el PSC ha vuelto sobre el tema con una propuesta para la refundación integral de la cadena. Un plan con una docena de medidas que este lunes ha presentado la Ejecutiva de los socialistas catalanes. Se trata, según indican desde la formación, de un “punto de partida sobre el necesario debate del futuro de los medios públicos en Catalunya” y que tiene como objetivo prioritario que TV3 y Catalunya Ràdio dejen de ser los “altavoces mediáticos del proceso independentista” en los que creen que se han convertido.
Los socialistas consideran que una de las cuestiones más urgentes es la renovación de los órganos de dirección y control, es decir, el Consell de Govern y el Consell de l'Audiovisual, dos organismos caducados desde hace años y que no han reflejado las mayorías parlamentarias de las últimas dos legislaturas por la incapacidad de los grupos para nombrar sustitutos. El PSC considera además que estos cambios en la cúpula deberían conllevar también la sustitución de las direcciones de los medios públicos, en la línea con la dimisión del jefe de informativos de TV3, David Bassa, que los socialistas ya reclamaron hace dos semanas.
Una de las principales críticas que lanza el PSC contra los medios públicos catalanes es la de “sentirse cómoda” tras haberse convertido en un instrumento del Govern en favor de la secesión, pese a que eso le haya llevado a “dejar totalmente de lado a una parte de la sociedad catalana”. Por ello, el partido de Illa entiende que es hora de que TV3 y la radio pública vuelvan a centrarse en su misión de servicio público en los términos establecidos en la ley del año 2005, que exige a los medios de la Generalitat “la transmisión de una información veraz, objetiva y equilibrada, respetuosa con el pluralismo político, social y cultural, y también con el equilibrio territorial”. Una tarea, por tanto, que facilite el “diálogo, comprensión y cohesión” entre diferentes.
Otro de los objetivos que propone el plan es “reconstruir los vínculos de confianza” entre los medios públicos y el conjunto de los catalanes. “La Corporación Catalana de Medios debe disponer de medios públicos en todas partes y para todos”, afirma la formación, subrayando que la veracidad y confianza ciudadana en sus medios debe darse no solo en los contenidos informativos y de actualidad, sino también en la programación de entretenimiento y los formatos educativos. “Una oferta que debe integrar todos los medios de la CCMA con una propuesta digital, transmedia y multiplataforma”, inciden.
Para reconectar con el conjunto de la sociedad y poder dirigirse a un público plural, los socialistas se fijan también en el libro de estilo de la Corporación, un documento que, a su juicio, no ha sido suficientemente revisado por falta de voluntad del equipo gestor y que “tampoco los directivos han velado suficientemente para el seguimiento de sus preceptos, especialmente los que hacen referencia a la neutralidad política y la representación de la diversidad de la sociedad catalana”. Por esta razón, el PSC considera que el libro de estilo debe ser “adaptado y revisado” para convertirse en “un instrumento interno de guía y manual para los profesionales”.
Las reformas que proponen los socialistas para la radio y televisión públicas no se quedan en la cúspide sino que afectan a toda la estructura de los medios. Así, el documento que han redactado apuesta por una reestructuración organizativa que permita la culminación de una Corporación adaptada al momento que vive el sector audiovisual y centrada en el ámbito digital, que pueda centrarse en las funciones nucleares de lo que debe ser un medio público y, a la vez, que mediante el trabajo con productoras y empresas externas vuelva a convertir a TV3 en un instrumento clave para el impulso del sector.
En paralelo proponen otra reestructuración, en este caso técnica y operativa. El objetivo de esta propuesta, indican, es “adaptar toda la cadena de valor de los medios públicos a los nuevos entornos comunicativos, que requieren una mayor flexibilidad y agilidad”. Esta propuesta significaría, en la práctica, una integración digital del aparato informativo de toda la corporación. Los socialistas apuesta por tanto por una redacción informativa única, además de centralizar la producción de contenidos.
En el ámbito de la calidad, además del Consell de l'Audiovisual (CAC), el PSC mira a modelos de televisión pública europeos como la ARD alemana o la RAI italiana, entre otras, para proponer una evaluación constante mediante encuestas ciudadanas, donde la ciudadanía pueda plasmar su percepción sobre la calidad y el valor que tienen TV3 y Catalunya Ràdio para ellos. Una metodología de evaluación que debe ser “regular” y que no solo debe medir solo la calidad del servicio público ya prestado, sino que debe servir también para poder diseñar y programar contenidos en el futuro.