El expresident de la Generalitat Carles Puigdemont ha reuniendo este jueves a la cúpula de Junts en Bruselas para ultimar la decisión del partido sobre las negociaciones con el PSOE, según ha avanzado el diario Ara y ha podido confirmar este diario. Los dirigentes de la formación están intentando acordar los últimos flecos sobre el articulado de la ley de amnistía que desatascaría el pacto global con la formación independentista.
Después de que socialistas y ERC hayan cerrado otro acuerdo sobre el contenido de la ley de amnistía y el traspaso integral de Rodalies, las cercanías de Catalunya, los votos de los republicanos se dan por descontados y ERC valora anunciar oficialmente su entendimiento con el PSOE este mismo jueves, que supone apoyar la investidura de Pedro Sánchez.
En esta situación, a Sánchez solo se faltaría por cerrar los votos de Junts, que siguen dependiendo de un acuerdo satisfactorio sobre la ley de amnistía. Las demandas de la formación de Carles Puigdemont estaban centradas en la ley del olvido penal, aunque también había reclamaciones sobre el catalán en la Unión Europea y cuestiones relativas al tratamiento del independentismo por parte del CNI y de Interpol.
Según ha avanzado Rac1, los socialistas también han enviado a un negociador a la capital belga. El pasado lunes el secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, viajó hasta el Parlamento Europeo para reunirse con Puigdemont. Un gesto que, para Junts, suponía reconocer al expresident como interlocutor político después de seis años fuera de Catalunya.
Si acaba habiendo un acuerdo final sobre el texto de la investidura, la idea de los partidos es registrar una proposición conjunta en el Congreso con la firma de todos los partidos socios de la coalición de Gobierno, además de PSOE y Sumar. Esta iniciativa podría registrarse esta misma semana, de forma que el debate de investidura podría fijarse para la próxima, unos plazos que son del agrado de la Moncloa.
El acuerdo con ERC: Rodalies y amnistía
El pacto encarrilado con los republicanos comprende todas las carpetas que el partido de Oriol Junqueras había puesto sobre la mesa, aunque unas tienen más intensidad que otras. La más destacada es el traspaso “integral” de Rodalies, un compromiso que la Generalitat ha buscado durante más de una década y que supondría la transferencia a Catalunya no solo de los fondos necesarios para sufragar el servicio sino también la red ferroviaria y los trenes.
Otro de los asuntos que han ocupado más tiempo en la negociación entre el PSOE y ERC ha sido el alcance de la amnistía. Según aseguró el Govern este martes, el borrador dejaba fuera las causas del Tsunami Democràtic y los CDR, que se instruyen en la Audiencia Nacional y en las que hay posibilidad de que se formulen acusaciones sobre el terrorismo. Finalmente el pasado martes ambas formaciones anunciaron un compromiso sobre el texto de la ley, que los republicanos aseguran que ha servido para dar cobertura a los acusados en esos dos sumarios.