Luis Martínez Doreste es un regatista que ha ganado en siete ocasiones la Copa del Rey de vela. También es, en sus ratos libres, el cantante de The Tutsies, una banda de versiones ochenteras que este viernes tenía la difícil tarea de animar el acto final de campaña de Ciudadanos en Barcelona. El partido naranja ha intentado compensar los malos resultados que le vaticinan las encuestas con una fiesta -consumición incluida- a la que han acudido numerosos cargos y militantes de toda España junto a todos los dirigentes destacados del partido.
Según los sondeos, Ciudadanos puede ser el partido que más caro pague la repetición electoral. La formación podría pasar de tercera a quinta fuerza -superado por la ultraderecha de Vox y Unidas Podemos- y perder hasta 40 diputados, bajando de los 57 actuales hasta 16.
Para combatir el desánimo, Rivera ha apelado a los votantes desmovilizados y a los resultados obtenidos en Catalunya y Andalucía en los anteriores comicios autonómicos. “Aquí huele a remontada porque nacimos como los salmones, remontando el río”, ha asegurado el presidente del partido. “Si el domingo nos movilizamos puede haber una sorpresa electoral”, ha añadido.
Rivera ha sido recibido con unos tímidos gritos de “presidente” que poco a poco han ido ganando intensidad. Ante unas letras sostenidas por los militantes en las que se podía leer “Sí se puede”, el candidato ha defendido su opción como la única que puede acabar con el bloqueo. “Quiero poner España por delante de las siglas de Ciudadanos porque Ciudadanos es España”, ha asegurado ante unas 2.000 personas -3.000 según la organización. La próxima candidata a presidir la Generalitat, Lorena Roldán, ha apuntado en la misma dirección y ha presentado a Rivera como el único candidato “capaz de llegar a acuerdos” con “los que piensan distinto”.
Tanto Rivera como Inés Arrimadas y Roldán han insistido en la necesidad de movilizar a los votantes que el pasado 28 de abril apoyaron al partido. “Con dos puntos más de votos para Ciudadanos sacaremos 20 escaños más y esto producirá una mayoría de cambio”, han asegurado los tres durante sus respectivos discursos.
A falta de pocos días para el evento, la dirección del partido emplazó a todos sus dirigentes a desplazarse hasta la capital catalana para “estar donde es más difícil” y “cerca de quiénes necesitan nuestro apoyo”. Los cargos han respondido y han llenado la sala habilitada en el Palau de Congressos de Catalunya, el mismo lugar donde la semana pasada se presentó la llamada Assemblea de Càrrecs Electes y el donde el lunes los reyes entregaron los premios de la Fundación Princesa de Girona. Al acto ha acudido toda la plana mayor del partido: Begoña Villacís, José Manuel Villegas, Fernando de Páramo… para no faltar, no han faltado ni los padres de Rivera, a los que Arrimadas ha agradecido su presencia.
Rivera también ha esgrimido la obra de gobierno de su partido en la Junta de Andalucía y, en un mensaje dirigido al PP y PSOE, ha espetado que los españoles “no se merecen gobiernos donde roben o se gasten el dinero en putas”. Rivera ha insistido en más de una ocasión en señalar la corrupción del bipartidismo: “Los españoles se merecen sacar a los chorizos ibéricos para poner a los liberales ibéricos”.
A pesar de que durante la campaña casi todos los focos han estado puestos en Catalunya, Ciudadanos no ha conseguido rentabilizar como de costumbre su oposición al independentismo. Los de Rivera podrían bajar de 5 a 2 diputados en la comunidad y obtener los mismos resultados que PP y Vox, que obtuvieron un escaño cada uno en las anteriores generales.
Ante esta fuga de votos, Rivera ha insistido en que su partido es la mejor garantía para luchar contra el secesionismo y ha apelado de manera velada al votante de Vox. “No es momento de votar con las vísceras”, ha señalado. “Votad con la cabeza”, ha continuado, “porque lo más valiente y patriótico es votar a un partido que garantiza la unidad y la libertad de los españoles”.
Arrimadas, por su parte, también ha recordado que es posible remontar los sondeos y ha vaticinado que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, se arrepentirá de la repetición electoral. “A alguno se le va a atragantar la cena del domingo por la noche”, ha afirmado. “Empieza por Pedro y acaba por Sánchez”.