Pedro Sánchez desembarca en Catalunya para el último sprint de campaña en el que su partido y el gobierno que preside se juegan tantas cosas. El presidente ha acompañado este jueves al líder del PSC, Salvador Illa, en un acto multitudinario en Vilanova i la Geltrú en el que ha arremetido contra la estrategia del PP de copiar el discurso antiinmigración de la extrema derecha y en el que también se ha mostrado especialmente contundente hacia el independentismo catalán.
“Durante estos últimos diez años el independentismo de ERC o Junts, con el respaldo de la CUP. ha llevado la educación en Catalunya de la cabeza a la cola de España. Y lo mismo en sequía, en sanidad o en el despliegue de energías renovables”, ha criticado.
Pero la ofensiva dialéctica de Sánchez no ha acabado ahí. El presidente del Gobierno, que cuenta entre sus socios parlamentarios de legislatura a los independentistas de Junts tras acordar la ley de amnistía, ha señalado directamente a su líder, Carles Puigdemont, como corresponsable de la crisis territorial derivada del procès junto al presidente Mariano Rajoy, al que ha equiparado.
“Dos presidentes de derechas, uno en la Moncloa y otro en la Generalitat, llevaron a Catalunya y España a la mayor quiebra social y territorial de los últimos 45 años. Y eso no lo podemos olvidar”, ha recordado para pedir el voto este domingo por Salvador Illa. “Con un presidente socialista en la Moncloa y otro en la Generalitat, Catalunya y España van a ser imparables durante los próximos cuatro años”.
Tras el volantazo en la estrategia electoral del PP, que en los últimos días y ante la evolución de las encuestas ha optado por emular el discurso xenófobo de la ultraderecha de Vox y de Aliança Catalana en materia de inmigración, Pedro Sánchez ha equiparado a los de Feijóo con esas opciones políticas.
“¿Qué tenemos enfrente? ¿Qué proyecto tiene el PP?”, se ha preguntado para concluir: “Lo que parece es que se presentan más partidos ultraderechistas que nunca: la ultraderecha independentista, la ultraderecha españolista y, visto lo visto, también el PP de Feijóo”.
El líder del PSOE ha señalado que los populares “banalizan la violencia de género allí donde gobiernan con la ultraderecha, identifican la inmigración con la delincuencia y aprueban leyes que revisan la historia democrática de nuestro país”, en referencia a las denominadas “leyes de concordia” que revisan la legislación sobre memoria democrática y que a juicio de Naciones Unidas vulneran el derecho internacional sobre protección a las víctimas.
“Feijóo y Abascal, PP y Vox son, en realidad, las mismas siglas que representan el retroceso. La mejor manera de parar a las ultraderechas es votar al PSC y a Salvador Illa”, ha concluido entre aplausos. Antes, la gran ovación la provocó al insistir en despejar cualquier fantasma que aún pueda revolotear en torno a su reflexión de cinco días en la que llegó a valorar la dimisión. “Me vais a tener a vuestro lado porque tengo más ganas y más fuerzas que nunca”, zanjó.