Los tres presidentes provinciales del PP, Alfonso Rus (Valencia), José Císcar (Alicante) y Javier Moliner (Castellón) han sido convocados por el President de la Generalitat, Alberto Fabra, para abordar su respaldo a la candidatura que quiere encabezar el actual dirigente autonómico.
Será en un almuerzo este viernes en Valencia donde se hablará de la crisis interna que se ha mostrado después de que Rus, siempre arisco con Fabra, esquivara dar un apoyo explícito al President refrendando la recogida de firmas impulsada de cara a Madrid para ser nominado candidato; y también de Císcar, quien se ha distanciado del President especialment tras el aso de las filtraciones de información sensible de la Generalitat y la consecuencia de la crisis de los interrogatorios del jefe de seguridad de Fabra a un colaborador de Císcar.
Detrás de esta falta de apoyos podría estar el malestar causado por la intención de Fabra de desvincular el emparejamiento tácito de que los presidentes de las diputaciones provinciales también lo sean del PP en cada una de las demarcaciones, impidiendo así la aspiración de Císcar de presidir la de Alicante, y restar poder a Moliner en Castellón, pero especialmente a Rus en Valencia.
En esta reunión faltará la mujer más poderosa del PP valenciano, Rita Barberá, quien también ha esquivado en diferentes ocasiones dar el apoyo explícito a Fabra como candidato, y se ha remitido a las órdenes que lleguen desde Madrid. Por el contrario el único respaldo que ha recibido el President ha sido más que incómodo, el de la imputada alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo.
El suspense de la elección de candidato durará al menos dos meses ya que desde Génova se insiste en que la proclamación oficial de candidatos no se hará hasta febrero, y la número 2 del PP, María Dolores de Cospedal ya dijo que tenían diversas opciones en la Comunitat Valenciana. Mientrastanto Fabra intenta luchar por la candidatura y reta a cualquier otro aspirante a que levante la mano y presente batalla.