A la toma de posesión con alcalde de Alicante asistirán 400 invitados entre los que destaca el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra. La alcaldesa, Sonia Castedo, que este viernes declara como imputada del caso Rabasa, no ha confirmado su presencia.
Elegido por el Partido Popular de la Comunitat, por ser un político de perfil bajo y contar con un “talante dialogante”, no parece que sus compañeros de banquillo se lo vayan a poner fácil. Fuentes populares denuncian el pulso mantenido por la llamada “guardia de corps” de Sonia Castedo, que ha bloqueado durante más de una semana la sucesión. De “sin vergüenzas”, han calificado estas fuentes a algunos concejales populares, que se han negado a firmar, hasta el último momento, el acta de renuncia que permitirá al número 8 de la lista, Miguel Valor, convertirse en el alcalde de Alicante.
Y es que los cambios inquietan al núcleo duro de la exalcaldesa, que no va a permitir perder “ni un ápice” de influencia. No han gustado nada las primeras medidas tomadas por Valor: dejar intervenir a los grupos de la oposición en el acto de toma de posesión y trasladar al martes la junta de Gobierno, lo que va a permitir a la oposición un mayor margen de maniobra.
En cualquier caso, otras fuentes consultadas del grupo popular, desmienten este extremo. Apuntan que “la sintonía en el grupo municipal es total”, y que se ha cumplido “escrupulosamente” con los plazos para elegir al nuevo alcalde.
Respecto a la posible remodelación del gobierno municipal; no se descarta, “aunque todavía es muy pronto”, apuntan todas las fuentes consultadas.
Sombras y luces en la gestión de Valor
Tras dos décadas de gestión en el ámbito de la cultura en la Diputación de Alicante y casi una en el mismo área en el Ayuntamiento, Miguel Valor llega a la alcaldía de Alicante con más de una denuncia a sus espaldas, por parte de la oposición: cobros indebidos en órganos “ineficaces”; nepotismo y “enchufismo”. Además, ha sido reprobado por falta de dialogo en la gestión del Teatro Principal de Alicante, de cuyos órganos apartó a la oposición con la excusa, afirman, de que “filtraban la programación”.
En febrero de 2010, Miguel Valor fue denunciado por el PSPV-PSOE y Esquerra Unida por cobrar dietas de la Comisión Técnica de Coordinación de Programas Culturales de Artes Plásticas del Patronato de Cultura del consistorio. Un órgano del que el propio Valor – como presidente –, su secretaria y el jefe de servicio de la concejalía cobraban dietas (90 euros) por cada reunión a la que asistían. Valor a su llegada a la concejalía en 2007, disolvió la comisión técnica que funcionaba desde 2002. Dos semanas más tarde, el concejal activó un órgano similar, con el mismo nombre, pero del que desaparecieron los técnicos especialistas. Se calcula que se han cobrado “indebidamente” 30.000 euros anuales en dietas. Valor en 2011 renunció a las dietas tras las denuncia de Socialistas y Esquerra Unida, aunque no devolvió lo cobrado.
En 2012, tras la disolución del Patronato de Cultura, incluido en el plan de ajuste del Ministro Montoro, el Ayuntamiento incorporó a la plantilla municipal hasta siete trabajadores que hasta entonces estaban en régimen de obra y servicio. Este es el caso de su hija, Olga Valor Climent que es asesora de alcaldía. También, su sobrina Rosana Nadal Valor, que trabajaba de asesora en el Patronato de Cultura, pasó a la concejalía de su tío. Ya en 2011, la oposición exigió “imparcialidad y objetividad” en las pruebas para una plaza de auxiliar de gestión cultural. Y es que en el listado de admitidos figura la sobrina del futuro alcalde.
Miguel Valor, además de protagonizar, tal y como les venimos contando, uno de los pinchazos policiales del “caso Brugal”, en el que llama a Enrique Ortiz para informarle de la adjudicación de obras en el Castillo de Santa Bárbara, la oposición sitúa bajo la lupa a “empresas amigas” que pasan de gestionar con el entonces diputado de Cultura, los yacimientos arqueológicos de Lucentum y la Illeta, y el MARQ, a tener a su disposición el espacio expositor del Castillo, cuando llegó al Ayuntamiento.
Esatur XXI, S.L., según denuncia Esquerra Unida en 2013, es la adjudicataria de la gestión de las exposiciones del Castillo por un canon de 11.000 euros, cuando en seis meses la empresa obtuvo unos ingresos de más de 105.000 euros. Una deficiente gestión, que también afecta a los dos yacimientos arqueológicos de la ciudad de Alicante: la villa romana del Parque de las Naciones y el del Cerro de las Balsas. La oposición califica de “imperdonable”, además de “peligroso”, el estado de abandono de unos vestigios que tienen la protección patrimonial de Bien de Interés Cultural
Sonia Castedo no ha confirmado su presencia
El acto, que comenzara a la once de la mañana, en el Salón Azul, contará con la presencia de 400 invitados. Entre ellos destaca el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra y todos los exalcaldes de la ciudad. El evento se iniciará con la toma de posesión de la nueva concejala del PP, Carolina Concepción. Tras ello, tomarán la palabra, durante cuatro minutos, los candidatos que los grupos municipales propongan como alcalde. Por Esquerra Unida intervendrá, Miguel Ángel Pavón, por UPYD, Fernando LLopis y por el Partido Popular, lo hará Miguel Valor, que tras su intervención y gracias a la mayoría absoluta de su grupo, logrará el sillón de alcalde, tras la votación.
Se da la circunstancia de que Elena Martín, cabeza de lista socialista en 2011, será la que pronuncie el discurso de candidata. Martín, que ha protagonizado duros encuentros con la ejecutiva local, fue apartada de la portavocía del grupo y se le despojó de la dedicación exclusiva y por tanto del sueldo. En estos momentos, cuenta con hasta dos expedientes abiertos por discrepancias con la actual dirección socialista, en cuestiones relacionadas con el Plan General de Alicante o Rabasa.