Elche, municipio antifascista y antirracista con la abstención del PP

La ciudad de Elche se ha declarado este lunes “zona libre de fascismo, racismo y xenofobia”. Compromís per Elx ha llevado al pleno municipal una moción propuesta por el colectivo local Respuesta Popular que ha contado con el respaldo de todos los grupos políticos con representación (PSPV-PSOE, Ciudadanos, Ilicitanos por Elche, Partido de Elche y los cuatro ediles de la coalición) menos el Partido Popular, que ha vuelto a ponerse de perfil en cuestiones relacionadas con la extrema derecha o el racismo.

Ya lo hizo a finales de abril, cuando en una reunión de la Junta de Portavoces, la representante del PP, Mercedes Alonso, rechazó apoyar una declaración institucional cuyo contenido era idéntico al que finalmente ha salido aprobado este lunes. En lugar de reconocer esta postura, adujo a este medio que había sido el alcalde, el socialista Carlos González, el que la había frenado.

Más tarde, con el inicio del curso político tras el verano, Respuesta Popular volvió a llamar a la puerta del PP para lograr el cometido que se había propuesto, que fueran todos los grupos políticos los que respaldaran la medida que en la práctica se traduce en una serie de acciones para frenar el avance del fascismo y del racismo. De nuevo, el PP se posicionó en contra. Esta vez, en vez de acusar a otros grupos políticos de haberla echada para atrás, se justificó desde uno de los dos sectores que mantienen dividido al grupo municipal que había sido el otro –el de Alonso- el que volvía a negarse a apoyarla.

Sin embargo, esa supuesta división en las filas populares no se ha visto en el momento de la votación de la moción de este lunes, cuando ambos sectores enfrentados han votado en el mismo sentido, es decir, se han abstenido. Tampoco han querido dar la cara. A diferencia de en otras mociones, ninguno de sus nueve regidores ha pedido la palabra para explicar el sentido de su voto, y eso que Alonso y Ruz se han mostrado muy activos en otros puntos del pleno municipal.

Propuestas

La moción redactada por Respuesta Popular y promovida por Compromís establece trece puntos específicos para frenar ideologías del odio. En una de ellas se acuerda que el Ayuntamiento de Elche prohibirá en la vía pública “cualquier actividad discriminatoria o que fomente el odio a determinados grupos de población por motivos étnicos, de procedencia o de orientación sexual”. También se concreta la creación de un correo electrónico municipal para que la ciudadanía denuncie de “forma anónima” actos xenófobos. En este sentido, Elche ya ha registrado pintadas contrarias al islam en mezquitas de la ciudad o campañas de recogidas de alimentos “solo para españoles” de un grupúsculo de la extrema derecha.

Otras de las medidas destacadas que deberá de poner en marcha el consistorio es una “campaña permanente” para reducir los falsos rumores que acusan a las personas inmigrantes de los problemas sociales. Por último, se reclama “instar a subdelegación del gobierno” a actuar de oficio ante la proliferación de actividades de odio, así como que el municipio tome, “en el menor tiempo posible, las medidas jurídicas necesarias para garantizar el cumplimiento de lo establecido en esta moción”.