El jurado popular declaró “no culpable” a Miguel López del crimen a tiros de su suegra, María del Carmen Martínez, viuda del expresidente de Caja Mediterráneo (CAM) Vicente Sala, porque nadie le vio y por falta de pruebas de que fuera la persona que efectuase los disparos.
La Audiencia de Alicante ha dictado este lunes la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, que es absolutoria para López, el único acusado en el juicio antes de ser absuelto de un supuesto delito de asesinato y otro de tenencia ilícita de armas, por el que se le pedían 24 años de cárcel.
La sentencia ha sido dictada por la presidenta del tribunal, la magistrada Francisca Bru, quien refleja que las seis mujeres y tres hombres del jurado emitieron el veredicto de “no culpable” con 6 votos a favor y 3 en contra porque “nadie testificó en el acto de la vista oral” haber visto a López “acompañar a su suegra al lavadero” ni en los “posteriores hechos producidos”.
El veredicto definitivo se emitió el domingo 10 de noviembre por la tarde, 48 horas después de otro previo que la magistrada devolvió por errores en algunas de las doce preguntas que formaban parte en el denominado 'objeto del veredicto“.
Con la decisión de que el yerno es “no culpable”, el jurado rechazó la tesis tanto de la fiscalía como de la acusación particular, ejercida por el hijo primogénito del matrimonio Sala Martínez, Vicente.
La sentencia apunta que, en el veredicto, el jurado concluyó “expresamente que la prueba de la parafina dio negativo (en López), según el informe pericial de residuos de disparo, indicando que no hay huellas de Miguel ni ADN en el escenario del crimen”.
Respecto a la pistola de alrededor de cien años utilizada, el jurado estimó que la misma “no se ha encontrado” y añadió “expresamente que, como no ha sido probado que Miguel López disparara, es irrelevante que no tuviese licencia de armas adecuada para el tipo de arma que se utilizó en el crimen”.
La sentencia ha sido repartida hoy a la defensa, la acusación particular y la fiscalía, partes estas dos ultimas que ya anunciaron la pasada semana que tenían intención de analizar el contenido ante la posibilidad de recurrir en apelación ante la sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
Una de las partes que estudiarán detenidamente será el acta de devolución del primer objeto del veredicto, lo cual ocurrió el viernes 8 por la noche.
María del Carmen Martínez falleció poco antes de las 19 horas del 9 de diciembre de 2016 desangrada tras recibir dos disparos en la cabeza de un desconocido cuando recogía su coche en el lavadero del concesionario Novocar, que regentaba López.
Durante el juicio se han reflejado las diferencias irreconciliables entre la víctima y su hijo primogénito, el citado Vicente Sala Martínez, por un lado, y las tres hijas y sus cónyuges, por otro.
Estas desavenencias tienen su origen en la gestión de los negocios familiares, con un valor de unos 120 millones de euros sobre todo por la firma de plásticos Samar, y se ha puesto de manifiesto que la víctima tenía previsto traspasar la 'acción de oro' a su primogénito, lo que le habría dado el control de las empresas en perjuicio de las tres hermanas.