El Ayuntamiento de Borriana, gobernado por PP y Vox, ha impulsado una jornada especialmente dirigida al público infantil dedicada a la promoción de los bous al carrer dentro de la celebración de sus fiestas de la Misericordia.
Diseñada “para las familias”, en la convocatoria se realizaron diversas actividades vinculadas al mundo taurino. Por la mañana se realizaron talleres de divisas, los símbolos que se clavan a las reses para identificar con colores de qué ganadería es el animal. También se produjo un concurso de dibujo taurino. Ambas propuestas fueron organizadas por la Federación Taurina de Borriana y en ellas participó el propio alcalde, Jorge Monferrer (PP).
Ya por la tarde, dentro del recinto de los cadafals donde se celebran los festejos taurinos, se organizaron cuatro 'encierros infantiles' y un concurso de recortes. Esta actividad estaba directamente organizada por el Ayuntamiento.
Por la noche se ofreció un taller infantil de emboladores donde los niños aprendían a crear las bolas que se colocan en los cuernos de los toros para encenderlas después, así como también los diferentes aparatos necesarios para colocarlas en el animal. Finalmente se ofreció un bou embolat infantil, con carretones embolados que emulaban a los animales que se usan en estos festejos.
La concejala de Fiestas, Paloma Boix destacaba la importancia de estas actividades ya que “es fundamental que las fiestas de Borriana ofrezcan espacios y momentos dedicados a los más pequeños. Queremos que los niños no solo disfruten, sino que también aprendan y se sientan parte de nuestras tradiciones”. Boix ha añadido, además, que “estas actividades son una manera de inculcar a nuestros infantes el valor de nuestras costumbres desde una edad temprana, en un ambiente seguro y divertido”.
La participación de menores de 16 años en los festejos taurinos está prohibida por la ley, lo que ha generado polémica por el coladero que se produce todos los años. Esta temporada hasta el momento ha habido un total de cuatro heridos menores de edad en festejos de bous al carrer, lo que ha llevado a que el Síndic de Greuges investigue de oficio al Gobierno valenciano.