La antigua fábrica textil Colortex de Ontinyent ya tiene comprador: una oferta de más de 2,6 millones de euros presentada por un fondo de inversión hace apenas unos días, ha resultado la más alta que ha podido conseguir hasta ahora la administración concursal de este procedimiento. El precio de venta supone menos de una cuarta parte del precio inicial de subasta de 11,5 millones que se marcó al inicio del proceso el pasado mas de abril.
Este lunes finalizó el plazo de diez días que disponían los acreedores privilegiados para mejorar la postura, es decir, presentar una oferta superior a la registrada durante la fase de subasta que ha durado sesenta días y no ha ocurrido, por lo cual la administración concursal ha decidido adjudicar el lote al postor que realizó la mayor oferta y sus correspondientes depósitos, un fondo de inversión español, para poder participar en el total de los 5 lotes por valor de 2.600.000 euros por el complejo industrial de Colortex.
Desde el departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Ontinyent se han hecho reiteradas visitas al complejo industrial y se ha urgido a la Dirección General de Calidad y Educación Ambiental a encontrar una solución con esta antigua fábrica ya no solo por el ‘’impacto ambiental’’ que continuamente supone la actividad en gran parte del municipio de Ontinyent por las reiteradas afecciones al entorno por la producción de olores fuertes y desagradables, si no por las quejas del vecindario, desde hace años, por la afección de los fuertes olores producidos desde la depuradora de la empresa, que se agravan en épocas de temperaturas altas y condiciones de inversión térmica, lo cual genera molestias incluso a centenares de metros de las instalaciones.
De este modo, después de su adjudicación, los nuevos promotores estarán obligados a llevar a cabo una descontaminación del suelo para la consecución de una solicitud de una nueva licencia de construcción, así como de la condición de solar en arreglo a la normativa municipal aplicable del Ayuntamiento de Ontinyent. Así mismo, tendrán que ejecutar dos grandes viarios (norte y este) y desarrollar y acabar las obras de urbanización completamente. En cuanto a las estructuras, estas son de los años 70, algunas de ellas metálicas, completamente deterioradas y con cubiertas de fibrocemento con aislamiento de lana de roca, residuo altamente peligroso y contaminante, por lo cual, también se requerirán trabajos de demolición y limpieza.
Cinco lotes
De los cinco lotes de los que se componía la subasta, el primero contendía dos edificios industriales (nave B y nave L), uno de ellos con cerca de 73.000 metros cuadrados distribuidos entre almacenes y oficinas y el otro, totalmente diáfano y con 1.952 metros cuadrados. Los dos con una valoración que supera el millón de euros; en el segundo lote se subastaba el complejo industrial compuesto por varias naves (F, G y J) entre las cuales suman más de 50.000 metros cuadrados. En el tercer lote se subastaba una parcela de suelo de más de 1.800 metros cuadrados con un precio de 40.647 euros; en el cuarto, estaban disponibles dos terrenos solares de tipología industrial y viarias y, finalmente, se subastaban cuatro parcelas de uso industrial que suman más de 6.000 metros cuadrados y que tienen un alto porcentaje de edificabilidad. En cuanto a su ubicación, este complejo está muy próximo a la A-7 y a la A-35 que enlazan con la capital del Turia, Alicante y Albacete, así como con las principales rutas de los cuatro puntos cardinales de España.