CCOO, UGT y CSIF han convocado una huelga indefinida en el transporte sanitario en ambulancia de la Comunidad Valenciana a partir del día 3 de diciembre. Este paro se retoma tras el aplazamiento de la convocatoria inicial, “una vez recuperada la normalidad suficiente para el correcto desarrollo del transporte sanitario” tras el episodio de la DANA.
Las organizaciones sindicales convocantes denuncian que este servicio público externalizado “está cimentado en el bajo coste y en las malas condiciones de las plantillas, que pueden llegar a realizar legalmente hasta 420 horas extra anuales”. La representación sindical reclama “un convenio digno para que las 2.000 personas trabajadoras empleadas en el sector dejen de ser el personal 'low cost' de la sanidad valenciana”.
Los sindicatos afirman que tras un año de negociaciones, la patronal y sus principales empresas, que prestan servicio para la sanidad pública, siguen sin realizar ninguna propuesta que posibilite un acuerdo. La Conselleria de Sanidad tampoco se ha dignado a atender las reuniones solicitadas por los sindicatos para pedirle que mediara por una solución pacífica del conflicto.
El servicio de ambulancias de la Conselleria de Sanidad se adjudicó el verano de 2022, por un periodo de 4 años. “Las mismas empresas que licitaron libremente y a las que se volvió a adjudicar el servicio niegan ahora al personal su derecho a revalorizar sus salarios y a mejorar sus condiciones de trabajo”, denuncian los sindicatos. Añaden además que “la patronal ni siquiera ofrece el muy insuficiente incremento del 3% anual al que se comprometieron con la Conselleria de Sanidad cuando les adjudicaron el servicio”.
Los sindicatos convocantes exigen la equiparación salarial con el resto de comunidades autónomas, donde se cobra solo por conceptos fijos entre un 20% y un 45% más (45% Madrid, 35% País Vasco, 30% Navarra o 25% Catalunya). “Aquí el personal del sector está subsistiendo con salarios de entre 1.050 euros y 1.200 euros netos por 40 horas semanales de trabajo, según categorías, con jornadas nocturnas y de lunes a domingo. Los ingresos sólo cuadran a costa de una desproporcionada cantidad de horas de exceso, que rozan las 420 horas extraordinarias anuales en alguna provincia” explican.
Manifiestan además que “la situación de las plantillas es insostenible, ya que los salarios no corresponden a la formación y responsabilidad requeridas, ni a las jornadas de trabajo realizada”s. “Urge adecuar las categorías profesionales a la formación requerida y mejorar significativamente los conceptos variables por jornadas nocturnas, trabajo en domingos, festivos, pluses transporte y dietas” reclaman.