La comisión de Coordinació, Organització i Règim de les Institucions de la Generalitat ha aprobado este jueves la proposición de Podemos para revocar a los senadores territoriales. La propuesta, ambiciosa en sus inicios, pretendía que Rita Barberá, senadora territorial designada por el PP, pudiera ser expulsada del Senado por la misma cámara que la designó.
La Operación Taula y el plantón de Barberá el pasado febrero en la misma comisión, que exigía explicaciones sobre el supuesto caso de blanqueo de capitales en el grupo municipal popular motivó esta propuesta, aunque siempre se ha defendido que no es una ley contra nadie.
Finalmente, en la ley aprobada no queda claro si la modificación afectaría a la senadora designada por el PP, actualmente en el grupo mixto. El texto legislativo es bastante ambiguo y da lugar a distintas interpretaciones, en especial sobre su retroactividad. Una de las enmiendas aprobadas versa así: “Los senadores designados conforme la regulación anterior estarán sometidos a lo que establece la presente ley”, lo cual no detalla si se refiere a los párrafos anteriores o a la ley anterior. Según las diversas fuentes consultadas por este diario, no tendría carácter retroactivo.
La redacción de la ley convierte la revocación en un campo de obstáculos. Para que esta sea efectiva, al menos dos grupos parlamentarios deberán solicitarla y requerirá la votación afirmativa de dos tercios de los diputados, es decir, 66 síes. Además, en otra de las enmiendas se estipula que no deberá haber ningún voto negativo entre los diputados del grupo que en su día propusiera al senador. Y, por último, no se podrá plantear más de una vez la revocación del mismo senador.
El texto, aprobado con los votos favorables de todos los grupos salvo el PP, pasará a pleno para su votación definitiva.