Las Corts Valencianes han celebrado este domingo su día, 25 de abril, en un acto marcado por la pandemia en el que el presidente de la cámara autonómica, Enric Morera, ha reivindicado la importancia de la investigación como “pilar fundamental” del estado de derecho social en el contexto actual y ha pedido “acabar con el odio y la intolerancia” porque “el radicalismo necesario es el de defender el sistema democrático”.
Así lo ha manifestado Morera en su intervención en el acto institucional en el que se ha entregado la Distinción Francesc de Vinatea a la Fundació per al Foment de la Investigació Sanitària i Biomèdica de la Comunitat Valenciana (Fisabio) y el Premi Guillem Agulló, creado en la legislatura pasada, para las fiscalías contra los delitos de odio y discriminación. Al acto han acudido el 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, diversos consellers y los síndics de los grupos.
Morera ha recordado el significado del 25 d'Abril, efeméride que conmemora la derrota en la batalla de Almansa y la pérdida de los fueros, y ha agradecido la “enorme responsabilidad del pueblo valenciano en unos momentos de tan alta dificultad”. En este sentido, ha recalcado la “obligación de reflexionar” y las “lecciones” que ha dejado la pandemia de la Covid-19 y que “hay que atender e interiorizar”.
El presidente de Les Corts Valencianes ha afirmado que, en este último año marcado por la pandemia, el modelo de estado autonómico “se ha visto sometido a un test de estrés tan grande como desconocido” y ha valorado que los valencianos “lo hemos superado razonablemente bien”.
En este sentido, ha destacado que el parlamentarismo en tiempos de pandemia “ha realizado un trabajo meritorio, tanto de los grupos
que apoyan al gobierno como de los que cumplen con la tarea de control desde la oposición“, una situación que ha sido posible, según Morera, ”gracias a la adaptación y flexibilidad del personal de la Cámara“. ”La democracia no se ha parado en ningún momento“, ha sostenido.
Así, ha puesto en valor que desde el 13 de marzo de 2020 hasta este mes, les Corts han tenido 19 sesiones de Pleno, 152 reuniones de comisiones parlamentarias, comparecencias del president del Consell, consellers y vicepresidentes. Además, ha remarcado la aprobación de leyes como la de la Función Pública Valenciana, la ampliación del concepto de voto telemático y la “adaptación a los tiempos” con intervenciones por videoconferencia en plenos y comisiones.
De entre todas las acciones ha destacado el acuerdo para la reconstrucción social, económica y sanitaria, un pacto “histórico aprobado por una amplia mayoría de las Cortes, con la participación y apoyo de agentes sociales de muchas disciplinas” y que “ha sido pionero de entre los parlamentos y que está marcando la hoja de la ruta estratégica para el poder ejecutivo”.
Entre las cuestiones pendientes, ha puesto como ejemplo la infrafinanciación de la Comunitat Valenciana y ha remarcado la necesidad de un cambio del modelo de financiación para “dar cumplimiento a los principios de igualdad y de suficiencia que establece la Constitución”.
“Reflexionar sobre el devenir colectivo”
Por otro lado, Morera ha subrayado la “responsabilidad” de “reflexionar sobre el devenir colectivo” porque “la pandemia supondrá cambios en muchos aspectos de nuestras vidas”. Ante esta circunstancia, ha reivindicado “buenas políticas para resistir y para adaptarnos al nuevo tiempo” y ha puesto de manifiesto “las fracturas sociales, generacionales, institucionales y territoriales” como “las grandes asignaturas pendientes”, ya que, ha alertado, “en este contexto de excepcionalidad pueden agravarse”.
Sobre la gestión de la pandemia, la afirmado que la centralización “se ha evidenciado en muchos casos inútil e ineficaz”, al tiempo que ha señalado que “hay muchas cosas que conservar y muchas que cambiar”, como “la forma de entender España y de tomar las decisiones en un Estado compuesto, de nacionalidades y regiones”, que “tendrá que ser más realista, funcional, inclusivo y europeo”. Por ello, ha instado a “avanzar en la cogobernanza” y “afrontar la tradicional resistencia de las élites centralistas”.
También ha tenido palabras de reconocimiento hacia Fisabio y las fiscalías contra los delitos de odio y discriminación, respectivamente, porque “hemos visto cómo de importante es tener nuestro propio sistema de investigación” y “el gran trabajo de las fiscalías para defender a las personas atacadas por aquellos que no son capaces de convivir con quienes son diferentes en ellos”.
“En nuestra sociedad hay comportamientos ilícitos cuando atentan contra la convivencia y la libertad de los otros. La exaltación del nazismo, hacer apología del fascismo, hacer ostentación de la simbología franquista, negar el holocausto u homenajear la División Azul, por ejemplo, traspasan el límite de la libertad de expresión”, ha remarcado, al tiempo que ha reflexionado: “Cuando las ideologías se expresan con símbolos que recuerdan exterminios y asesinatos de miles de personas, la persecución y discriminación racial el horror, son algo más que expresiones ideológicas, son un delito”.
Morera ha lamentado que “a menudo se han tolerado acciones racistas y se ha blanqueado el fascismo”, aunque ha valorado “el avance” de la Ley de Memoria Histórica. “Para borrar el discurso de la intolerancia y del odio se tiene que hacer un trabajo legislativo para acabar con la impunidad penal de la exaltación del fascismo”, ha concluido.
“Más iguales”
Por su parte, Susana Gisbert ha agradecido la distinción del premio Guillem Agulló a las fiscalías contra los delitos de odio y discriminación como forma de “avanzar en la lucha para ser más iguales”. En este sentido, ha remarcado que el silencio “es el mejor cómplice” de este tipo de delitos y ha reflexionado: “Denunciar no es siempre lo que da todas las respuestas, pero no denunciar no da ninguna”.
Gisbert ha insistido en la importancia de “proteger” a las víctimas de los delitos y “especialmente a las más vulnerables”, al tiempo que ha destacado que “no estamos solas en la lucha por la igualdad”. Al respecto, se ha preguntado “qué víctimas pueden ser más vulnerables que las que sufren delitos de odio”.
La fiscal se ha marcado el “reto” de “tratar de conseguir que la igualdad, reflejada en la Constitución, no sea una utopía, sino una realidad”. Para ello, ha subrayado la importancia de que la ciudadanía conozca que la Fiscalía “está a disposición de todas las personas que sufren delitos de odio”.
Finalmente, el director gerente de Fisabio, José Antonio Manrique, ha agradecido el reconocimiento Francesc de Vinatea como “fruto del esfuerzo de todos los investigadores” del instituto, que desde el principio de la pandemia “ha sabido adaptar su trabajo para conocer mejor el virus y su comportamiento”.
“Este premio nos da ánimo en estos difíciles momentos”, ha afirmado Manrique, que ha apuntado que el futuro y la salida de la crisis sanitaria “está en el I+D+I”, por lo que ha instado a “poner en valor” este concepto. “Tenemos el derecho y la obligación de trabajar y reforzar el conocimiento de las personas, creando interacción entre los investigadores y la población”, ha declarado.
El director gerente de Fisabio ha apostado por una ciencia “abierta, participativa, con perspectiva de género y con vocación científica y de servicio público” y ha animado a “establecer sinergias y herramientas de cooperación entre administraciones”.
Así, ha destacado la voluntad de “continuar generando conocimiento” para “ayudar a resolver los problemas de la sociedad” y ha apostado por un papel de la ciencia para “mejorar la salud y la calidad de vida”. “Ese es nuestro deseo”, ha finalizado.