La Policía Nacional ha detenido a varias personas por su supuesta relación con una secta instalada en una masía en la localidad castellonense de Vistabella del Maestrat en la que presuntamente se habrían cometido abusos sexuales.
Fuentes conocedoras han confirmado a Europa Press la existencia de la investigación, que ha sido adelantada este jueves por Levante-EMV. Según las fuentes citadas por este diario, la secta habría estado sometiendo a sus adeptos a aberraciones sexuales, cometidas tanto sobre adultos como sobre menores, y se habría hecho con un patrimonio que los investigadores aún están cuantificando.
De momento, son nueve los detenidos, cuatro hombres y cinco mujeres, entre los que figura el presunto líder de la trama, un hombre de 64 años. La investigación comenzó hace más de un año y las detenciones se llevaron a cabo el pasado martes.
Fuentes conocedoras han precisado que la masía se encuentra a unos cinco o seis kilómetros de Vistabella y que se encuentra aislada.
Así mismo, han señalado a Europa Press que, aunque en la localidad se tenía constancia de la presencia de las personas ahora detenidas —ya que se les veía en algunas ocasiones por las tiendas del municipio—, estos no tenían prácticamente relación con los vecinos, entre los que se comentaba que en dicha masía se había instalado una “especie de comuna”.
El alcalde de Vistabella: “Estamos en shock”
El alcalde de Vistabella del Maestrat, Jordi Alcon, ha asegurado que en la localidad castellonense están “impactados” ante la desarticulación de la secta.
“Estamos en shock, puesto que no nos imaginábamos nunca esta situación”, ha destacado el primer edil, quien ha comentado a Europa Press que no había ninguna circunstancia en dicha masía que les hiciese sospechar de que en la misma se estaba cometiendo algún delito.
Alcon ha señalado que se ha enterado recientemente de las detenciones, aunque sí que observó el pasado martes un importante despliegue policial en la masía, que se encuentra a pocos kilómetros de distancia del pueblo.
Según ha explicado, “la gente que vivía allí formaba parte como de una comunidad y eran alternativos, pero nunca han ocasionado ningún problema y tampoco había grandes movimientos de coches ni ninguna situación que hiciera sospechar”.
El alcalde ha confirmado que las personas que vivían en la masía trabajaban en Vistabella y en otros pueblos, pero no tenían demasiada relación con los vecinos de la localidad.