Después de que una diferencia de 2.000 euros anuales entre la oferta ganadora, FCC-Esber, y la segunda, Vareser-Monrabal haya echo que la concesión de mantenimiento de edificios de la Diputación de València cambie de empresa, la anterior contrata anunció un ERE (Expediente de Regulación de Empleo) que afectará a los 26 trabajadores que desempeñaban esta función por la extinción de esta UTE.
Esta decisión no ha gustado en la Diputación de Valencia que ha lamentado que se “opte por el despido de los empleados” y no por recolocar a los trabajadores. Critica así el ente provincial que los trabajadores “acaben siendo víctimas de una lucha entre empresas del sector” después de perder la UTE Vareser-Monrabal una concesión que tenía desde el año 2001.
La Diputación considera que para “una mayor garantía laboral” de los empleados “hubiera resultado más ventajoso a nivel de funcionamiento seguir contando con los mismos trabajadores, puesto que ya están familiarizados con sus instalaciones y edificios”, añadiendo que por ello en el contrato de mantenimiento “se decidió facilitar la subrogación de los trabajadores”. No obstante subrayan que “fueron las empresas del sector, a través de la Asociación de Empresas de Mantenimiento Integral y Servicios Energéticos (AMI), las que recurrieron los pliegos (incluídos los trabajadores y la propia UTE Vareser-Monrabal) por incluir dicha subrogación, obligando a la Diputación a eliminar dicha condición”.
Desde la corporación provincial esperan que las empresas reconsideren la situación y puedan llegar a un acuerdo entre los anteriores prestadores del servicio y los nuevos adjudicatarios.