La dirección de Canal 9 dimite acusando a Fabra de mentir

Con los trabajadores tomando el plató para denunciar la pésima y posiblemente corrupta gestión del PP al frente de Canal 9, el gobierno valenciano debe afrontar un nuevo incendio: la dimisión en bloque de la directora general del ente, Rosa Vidal, y todo su equipo.

Vidal, abogada sin experiencia en el sector, fue elegida por Fabra para pilotar la nueva etapa de Canal 9. En su salida del cargo, sin embargo, no ha ahorrado críticas contra el presidente de la Generalitat Valenciana. La dimisión “atiende a una falta de confianza por parte del grupo directivo en la Generalitat tras el anuncio unilateral de cierre de RTVV ” y “tras haber faltado a la verdad en un comunicado de prensa posterior”, se dice en un comunicado.

Vidal se había opuesto de manera frontal al cierre. Creía que era posible sacar adelante la televisión, previo pacto con los trabajadores para recortar gastos de personal, y ya había adelantado a los empleados el martes por la noche que no pilotaría el proceso de cierre. Sin embargo, Fabra no atendió sus argumentos. Es más, al explicar su drástica decisión, no ahorró criticas contra la exdirectora general.

Su decisión, pese a todo inesperada, viene a complicar la liquidación de Canal 9, que se queda descabezada mientras los trabajadores que hace pocos días eran acusados de manipulación a favor del PP cargan ahora en un programa especial y continuo contra Fabra y sus predecesores en el Palau de la Generalitat.

Ahora mismo, la Generalitat podría nombrar a un nuevo director general cuya única misión sería pilotar el ente o dejar el cargo desierto hasta que se componga la comisión liquidadora encargada de poner fin a la historia de la televisión pública valenciana, nacida en 1989.

Para acentuar el vacío de poder, los cuatro miembros del consejo de administración de RTVV elegidos a propuesta del PP, presentaron su dimisión con la de Vidal. Según ha anunciado RTVV, Vicente Navarro de Luján, Estela Bernat, Lázaro Marín y Aránzazu Calzada han decidido dejar el ente tras el anuncio de cierre, ya que su vinculación con la empresa se centraba “en el compromiso con un proyecto de radiotelevisión autonómica pública y viable”.

No hay dinero

En contradicción con la versión oficial ofrecida por Alberto Fabra, Vidal ha comentado en sus círculos más cercanos que la Generalitat intentó salvar RTVV. Para ello, el presidente del gobierno valenciano habría intentado, según fuentes cercanas a la exdirectora general, que Madrid le diera más dinero a la Comunidad Valenciana.

Sin embargo, Mariano Rajoy y su Ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, que en ningún momento valoraron el eventual cierre de Canal 9, se opusieron a transferir más dinero a Valencia. Ni vía el FLA (Fondo de Liquidez Autonómico) ni vía autorización para aumentar el límite de déficit u otras fórmulas. Fabra, en esa tesitura, decidió, en compañía de su núcleo duro, cerrar RTVV.

Vidal accedió al cargo con los únicos votos a favor del PP hace 13 meses, en octubre de 2012. En las Cortes Valencianas, anunció que habría un modelo de televisión de “calidad”, con “financiación mixta” y que sería “plural,democrático y sostenible”. A pesar de cierta apertura, los críticos aseguraban que Canal 9 seguía siendo un órgano de agitación y propaganda del PP.

Los trabajadores de RTVV le pidieron tras el anuncio de cierre que continuara al frente de RTVV para no dejar descabezado el ente. Varios de ellos incluso le mostraron públicamente su apoyo hace unas semanas. Vidal, sin embargo, tras 24 horas frenéticas, ha tirado la toalla. El caos en Canal 9, una empresa que acumula deudas por 1.200 millones de euros, se agudiza.