La empresa pública de la Diputación de Valencia Divalterra ha iniciado desde hace unos meses una política de mejora salarial de algunos empleados de oficinas y mandos, mientras mantiene a los brigadistas, el montante de la plantilla más numeroso y que menos cobra, con la nómina congelada. El gerente Antonio Mas, nombrado el pasado año tras la detención de los dos cogerentes anteriores en la operación Alquería, ha optado por premiar a sus antiguos subordinados en el Servicio de Información Territorial, donde era jefe antes de su actual puesto.
Así, en pleno mes de agosto Antonio Mas realizó un informe para incrementar la nómina de sus antiguos subordinados en la sección de oficinas que fue ratificada por el consejo de administración del pasado 27 de septiembre. Una subida del salario bruto de 5.091 euros al año para diez empleados. Este incrementó fue retroactivo a contar desde el mes de junio de este año.
Otros dos trabajadores, mandos de nueva creación, también han visto mejorado su salario bruto de manera retroactiva. En este caso, el aumento de salario bruto con una reclasificación ha sido de 10.389,12 euros anuales. Se trata de los dos responsables de sector de los brigadistas, Valencia Norte y Valencia Sur. En este caso, los dos nuevos cargos salieron de la bolsa de trabajo que se creó para el coordinador de brigadas.
Divalterra ha aprobado recientemente la creación de una bolsa de trabajo para 47 nuevos brigadistas que tendrán contrato indefinido. La bolsa ha tenido el apoyo de la representante sindical en el consejo de administración (CSIF) y para su acceso habrá que realizar un proceso de selección con examen teórico, valoración de méritos y pruebas físicas.
Fuentes de la empresa explican que se ha creado una nueva bolsa y no se ha recurrido a la de noviembre de 2017 porque ahora los puestos que se crean son indefinidos. Pero la realidad es que la anterior todavía no ha caducado y ya se hizo un proceso de selección donde pasaron el corte más de 200 personas. Estos aspirantes a brigadistas tendrán que volver a pasar por el proceso y hacer las pruebas físicas con mochila, como la última vez en Villanueva de Castellón.