El arquitecto responsable de la ampliación de Feria Valencia, investigada ahora en les Corts, niega los sobrecostes y que existiera una relación de confianza con el equipo directivo. José María Tomás, cuyo estudio ejecutó el proyecto y la dirección de las obras en el recinto ferial, asegura que todos los costes de más están justificados.
El arquitecto se ha valido de la retórica para evitar el término sobrecostes. Para él, todos los “aumentos en el presupuesto” estaban justificados y obedecen, no a aumentos de precios, sino a aumentos de encargos. “No se trata de una obra, eran muchas obras y se iban realizando según las necesidades del recinto”, ha explicado. La entidad ferial y la Generalitat decidieron realizar “nuevos encargos y modificaciones” que conllevaron un incremento del coste de la obra de ampliación, ha justificado el responsable, añadiendo que contaban con todos los informes pertinentes.
José Tomás Llavador es un arquitecto de prestigio internacional especializado en obras públicas y durante una década trabajó con Feria Valencia en la ampliación cuyo coste hoy se investiga. El responsable de uno de los estudios más grandes de Valencia ha comparecido este jueves en les Corts para explicar sus relaciones con el recinto ferial en la comisión que intenta esclarecer la gestión del ente que hoy tiene un agujero de 1.000 millones de euros y dudas sobre su titularidad.
Estos sobrecostes que según Tomás Llavador no se produjeron están avalados por un informe de Intervención de la Generalitat, en el que consta que los costes de ampliación de la Feria pasaron de 300 a 600 millones de euros, un 80'6% más de lo previsto. El informe fue entregado a Fiscalía Anticorrupción para que investigara si hubo o no delito en este incremento y a finales de diciembre el ministerio decidió archivar la causa. Esta decisión de Fiscalía implica, para el PP -que mantiene este argumento desde el inicio de la comisión- y para el arquitecto, que el informe de Intervención no es riguroso.
“Es un disparate de informe porque se basa en un 2% de la obra y se extrapola a todo el recinto”, ha criticado Tomás Llavador ante las preguntas del diputado socialista José Muñoz. El representante del PSPV ha recriminado al arquitecto que cuestione este informe, que investiga el 100% del recinto a petición de Fiscalía.
El informe se hizo cuando Juan Carlos Moragues era conseller de Hacienda y señalaba que el importe de la inversión final en construcciones e instalaciones se desvió un 86,7% respecto al proyecto inicial, de modo que costó unos 252 millones más de los previstos. En algunos casos -el 2% de lo estudiado- los sobrecostes alcanzaron el 160% de diferencia.
En este rifirrafe parlamentario, el arquitecto, ante las preguntas del PP, ha insistido en desacreditar el estudio. “Cuando se investiga una obra se mira el coste principal, no el lavaplatos ni el macetero de la esquina, hay que buscar costes significativos”, ha dicho Tomás Llavador, quien después ha añadido que “en algunos casos el informe es poco riguroso y la mayoría de datos se basan en las ofertas de internet”.
El arquitecto ha puesto como ejemplo un informe de la Universidad Politécnica que asegura que los precios a los que se ajustó el proyecto de ampliación eran iguales o inferiores a los precios de mercado. Además, ha afeado al Consell que Intervención nunca le llamara para aclarar nada, pese a haberse ofrecido en varias ocasiones.