La multinacional Ford reorganiza el calendario previsto para acometer la transformación necesaria en la factoría de Almussafes para empezar a producir coches eléctricos.
Así lo dejó entrever la compañía al anunciar este miércoles que finalmente no se acogerá al plan de financiación europeo (Perte) al proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica (Perte) del vehículo eléctrico y conectado (VEC), en el que se le habían asignado 106 millones.
En un comunicado, Ford reconoció “un retraso en las planes de producción para España, lo que significa que no se puede aprovechar el programa de financiación PERTE” y añadió que buscarán “oportunidades de financiación adicionales a medida que avanzan hacia una gama de vehículos de pasajeros totalmente eléctricos para 2030”.
Al respecto, fuentes oficiales de Ford aseguraron a elDiario.es que se trata tan solo de una cuestión de plazos ya que para poner acceder a estas ayudas la electrificación de la planta valenciana debía estar acometida antes de junio de 2025.
En esta línea, según ha averiguado elDiario.es, la compañía ha modificado los plazos inicialmente previstos para acometer un proyecto más ambicioso con la idea de empezar a fabricar vehículos 100% eléctricos de última generación antes de 2030. En ese horizonte temporal, junto al Gobierno y a la Generalitat Valenciana se buscarán otras subvenciones que sustituyan al mencionado Perte.
Las mismas fuentes han descartado que la renuncia responda a que la multinacional haya modificado su posición respecto al futuro de Ford Almussafes al asegurar que elección de la planta valenciana para fabricar sus modelos eléctricos nunca estuva vinculada al Perte.
En este sentido se han pronunciado tanto desde el Gobierno valenciano como desde los sindicatos. Al respecto, el director general de Coordinación de la Acción de Gobierno y responsable de la Oficina Valenciana para la Recuperación, Juan Ángel Poyatos, señaló que la decisión de la compañía “es un cambio en sus plazos, no en sus planes” y ha incidido en que mantienen “todo el apoyo para esa transformación”.
Desde UGT, sindicato mayoritario, achacó la renuncia al Perte al no tener confirmados los nuevos modelos: “Desde UGT siempre hemos mantenido, que lo realmente decisivo y fundamental para la asignación de la nueva plataforma eléctrica de Ford, era que los trabajadores alcanzásemos un acuerdo con la dirección, que asegurase un clima laboral estable y garantizase las inversiones necesarias para acometer esa transformación hacia la electrificación. En ese sentido nos comprometimos en la sede de Ford en Colonia”.
Según comentaron, “en este momento cobra más importancia el Acuerdo por la Electrificación alcanzado el 27 de enero entre UGT y la compañía” por lo que trasladaron a la plantilla y al conjunto de la sociedad “tranquilidad, ya que no está en cuestión acometer las inversiones que garantizan la construcción de la plataforma eléctrica comprometida en dicho acuerdo y que garantiza miles de puestos de trabajo en muy buenas condiciones”.
Fuentes de Intersindical comentaron también que la decisión de la dirección es más “una cuestión técnica organizativa interna de Ford” y añadieron que son conscientes que en los plazos actuales en virtud del acuerdo firmado “se concedía la arquitectura nueva de vehículos eléctricos”, por lo que se mostraron “tranquilos porque eso continúa”.
Además, añadieron que “aún no están asignados los vehículos y por lo tanto es una decisión interna porque aún se desconocen los modelos que se van a fabricar”. Desde Intersindical exigieron a la dirección “la misma profesionalidad que piden a la plantilla para traer la carga de trabajo que merece Almussafes”.