Compromís ha evitado el riesgo de ruptura en la coalición. Tras la tumultuosa reunión de la asamblea el sábado, donde se tumbó la propuesta de primarias aprobada por los socios del partido –El Bloc, Iniciativa y Els Verds- las aguas vuelven a su cauce: El Consell General de la Coalición volverá a votar, con lígeros retoques, el reglamento que elegirá a los candidatos para las elecciones de 2015.
La propuesta consensuada pasa por cambiar las cuotas en Castellón. Allí, las minorías tendrán los puestos 3 y 4, en vez del 3 y el 5 pactado anteriormente. El acuerdo ha sido aceptado por el Bloc en Castellón y es visto con agrado por Iniciativa, el partido de Mónica Oltra, Els Verds y los independientes de Gent de Compromís.
El nuevo modelo de primarias, que serán abiertas a la ciudadanía, será sometido a refrendo de manera telemática, lo que agilizará el proceso y restará las tensiones habituales en una asamblea multitudinaria. El visto bueno de las minorías de Compromís –el Bloc es el partido mayoritario- y la anuencia del Bloc de Castelló, que con sus votos contribuyó a frustar el acuerdo el sábado, parecen garantizar el acuerdo.
Cesiones
Las cesiones de todas las partes permiten tranquilizar la crispación en el seno de la coalición. Tras la pifia del Consell General, tanto Iniciativa como Els Verds se negaban a votar de nuevo el acuerdo: instaron al Bloc a resolver sus “problemas internos”, en palabras de Oltra, y llegar a un pacto entre las direcciones de los partidos sin la ratificación de las bases. El partido de Enric Morera se negó, apostando, de manera conciliadora, por construir un nuevo acuerdo.
Éste parece que ha llegado, y, con ello, evita el vuelo en solitario de Iniciativa y Els Verds. Ambos, ante la crisis de la coalición, se planteron aunar sus fuerzas y lanzar, en alianza con Podemos y/o con otras fuerzas de izquierda, si fuera posible, su propia plataforma electoral. Las cesiones del Bloc en Castellón y la rectificación de Iniciativa y Els Verds allanan el camino al pacto.