El Gobierno obliga a Alicante a devolver 200.000 euros del plan antidrogas que el PP desvió
Nuevo varapalo para el Ayuntamiento de Alicante. El ministerio de Hacienda reclama al consistorio 200.000 euros procedentes de una subvención derivada para el plan nacional de drogodependencia porque considera que los gastos finales no están debidamente justificados.
Según ha explicado la concejal de Juventud -área que desarrolla estos programas-, Marisol Moreno, se trata de otra muestra de la “herencia recibida” de la gestión del PP. “A tenor de los resultados obtenidos en la investigación realizada por la Intervención Territorial de Alicante, de los 360.598 euros percibidos en concepto de las subvenciones, no son subvencionables los gastos por un total de 173.623,15 euros más los intereses”, explica el Ayuntamiento en un comunicado.
El error, según informan desde el consistorio, corresponde a los años 2012, 2014 y 2015, en los que gobernaba el PP con Sonia Castedo al frente. En concreto, esta concejalía recaía en Pablo Sandoval, hoy asesor en la Diputación de Alicante. Según la investigación del control financiero, el concejal destinó tras diferentes modificaciones de crédito, parte del importe de la subvención a actividades de promoción juvenil y contratación de empresas, animación y estudios, “actividades cuyo objeto no está dentro de la prevención de drogodependencias”, aclaran desde el Ayutnamiento. En concreto, 67.910,33 euros de la subvención de 2012, 51.712,07 euros de 2014 y 54.000,75 euros de 2015.
“El señor Sandoval, que ahora está de asesor en la Diputación, metía facturas que no tenían nada que ver con esa subvención. Y para decir una que ha llamado mucho la atención, en 2015 se gastaron 2.244 euros en un viaje, 24 billetes, a la isla de Tabarca con una foguera”, ha expuesto Moreno, acusando a su antecesor de desviar fondos. El importe que el Ayuntamiento tendrá que devolver es superior al del presupuesto de las concejalías de Juventud y Protección animal.
