Alrededor de medio centenar de medios aéreos trabajan desde primera hora del miércoles en las labores de extinción de los incendios de Bejís y Vall d'Ebo, que han arrasado hasta el momento unas 4.000 (con un perímetro próximo a los 50 kilómetros) y alrededor de 11.500 (y un perímetro de 80 kilómetros) hectáreas de masa forestal respectivamente. Entre los dos focos, alrededor de 2.000 personas han sido evacuadas de sus hogares en los últimas fechas, y un centenar de personas ha pasado la noche del martes al miércoles en albergues.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha asistido en la mañana del miércoles a la reunión del Cecopi (Centro de Coordinación Operativa Integrada) en la Eliana, donde se ha analizado la evolución de los dos grandes incendios que en estos momentos están asolando el interior de las provincias de Castellón y Alicante. El jefe del Consell ha reconocido que a lo largo del día puede haber algún momento positivo, con algunas lluvias “menores, intensas, pero se trata de tormentas locales que, a lo mejor, no afectan directamente al incendio”.
El incendio de Bejís, en Castellón, ha alcanzado ya la localidad de Alcublas, en la provincia de Valencia: “Es todavía prematuro cualquier tipo de análisis sobre cómo va a evolucionar, porque la meteorología esta mañana muy negativa, con el viento cambiando de una manera muy dinámica”. No obstante, el president ha reconocido que tienen la esperanza de que, a partir del medio día, puedan producirse tormentas y lluvias que ayuden “de una manera muy efectiva” a empezar a estabilizar el incendio.
En este sentido, ha reconocido que en la noche del martes se produjo un cambio “no previsto”: “A las 00 horas, cuando abandonamos el puesto de mando avanzado, había una situación meteorológica de tranquilidad, sin viento y con una humedad del 70%, pero a las 2 de la mañana se produjo un cambio de viento que provocó el desalojo preventivo de Sacañet”. Se espera ver cómo se desarrolla el día para comprobar la evolución del fuego.
Heridos en Bejís
Desde la Conselleria de Sanidad está en contacto con los centros hospitalarios para interesarse por el estado de salud de las personas que resultaron heridas al evacuar un tren que tuvo que detenerse a la altura de Caudiel (Castellón) ante la proximidad de las llamas, tres de ellas se encuentran en una situación de gravedad mayor, “y sobre todo una de ellas, una mujer de 58 años, que está ingresada en el hospital La Fe de València”. En cuanto a los dos bomberos que resultaron heridos, ya han sido dados de alta, igual que el agente forestal de Aragón, que también resultó herido: “Lo más importante, en éste y en todos los incendios, es la garantía de seguridad de las personas, de los vecinos que son evacuados de forma preventiva, y sobre todo de los bomberos. Hay que tomar el máximo de precaución”.
Respecto al hecho de que no se interrumpiera la circulación ferroviaria a pesar del incendio, Ximo Puig ha eludido hacer valoraciones y ha apuntado que Renfe ha abierto una investigación respecto a cómo se desarrollo el accidente: “Parece ser que la conductora actuó de una manera correcta y preventiva, porque no es que estuvieran las llamas, sino que había humo, y tomó la decisión, autorizada por sus mandos, de volver hacia Sagunto”. Respecto a la actuación de algunos viajeros, el presidente valenciano ha apuntado que está judicializada.
“Estamos viviendo una disrupción tremenda en cuanto a los vientos. Anoche no había ninguna previsión de que el fuego se fuera a desplazar hacia Sacañet, era todo lo contrario, todos los modelos meteorológicos en ese momento indicaban que las llamas iban a ir hacia donde ha ido esta mañana, hacia el Ragudo. Por lo tanto, hay que tener la máxima prudencia”, ha comentado Puig, quien ha añadido que ahora mismo se está pendiente de la evolución hacia la autovía, la A-23, “en este momento no hay ninguna afección directa pero, si cambia el viento, habría que tomar las decisiones oportunas”.
Difícil control
El jefe del Consell ha indicado que incendios con tantos kilómetros de perímetro como éstos hacen muy difícil su control, “no puede haber en todos los ámbitos medios terrestres, porque no hay suficientes efectivos y sería absolutamente desproporcionado”. “Confiamos en que los medios aéreos puedan trabajar intensamente durante todo el día y, a medida que haya menos humo, mejorarán las condiciones”
Los ministros del Interior, Fernando Grande Marlaska, y Ciencia, Diana Morant, visitan esta mañana los puestos de mando avanzado de en Bejís y la Vall d'Ebo respectivamente.