Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han abortado la medianoche de este domingo con pelotas de goma un motín protagonizado por entre 50 y 60 internos del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Zapadores, en Valencia, que se habían encaramado a uno de sus tejados.
Según han confirmado a EFE fuentes de la Delegación del Gobierno, los internos han logrado acceder al tejado del CIE a través del falso techo, sin que por el momento se conozcan más detalles de sus intenciones. Los CIE son centros no penitenciarios gestionados por la Policía donde se encierra a inmigrantes en situación irregular antes de ser expulsados sin que hayan cometido ningún delito.
Los agentes han disparado entonces varias salvas o cargas de proyección –de las que se emplean para lanzar las pelotas de goma, según las fuentes– y sin proyectil, con ánimo intimidatorio.
Al parecer, los internos habrían quemado alguna manta durante el incidente –lo que ha obligado a desplazarse a los bomberos– pero finalmente han depuesto su actitud y la situación ha quedado normalizada, después de que los agentes de la Unidad de Intervención Policial accedieran al tejado mediante escaleras articuladas para reducir a los amotinados.
En redes sociales se han podido ver varios vídeos grabados desde el entorno del CIE donde pueden escucharse detonaciones y gritos provenientes, al parecer, del interior de este centro.
Zapadores “vulnera los Derechos Humanos”
La plataforma CIEs NO ha vuelto a denunciar a través de su perfil de la red social Twitter (@CIEsNO), al tener conocimiento de este suceso, que este centro de Zapadores “vulnera los Derechos Humanos y su única solución es su cierre inmediato y sin condiciones”.
El 17 de septiembre del pasado año se registró un intento de fuga en este mismo CIE, en ese caso por parte de medio centenar de inmigrantes, que fue abortado por varios agentes del Cuerpo Nacional de Policía aunque varios de ellos lograron escapar.
Este CIE ha sido objeto en los últimos años de varias protestas por el estado de sus instalaciones y las denuncias recibidas por varios de sus internos, lo que ha llevado a partidos políticos y a entidades sociales y de apoyo a inmigrantes a exigir reiteradamente su cierre y la asunción de responsabilidades.