La segunda comisión de investigación de las Corts Valencianes sobre el accidente de Metro de Valencia ha arrancado este viernes con las comparecencias de los portavoces de todos los partidos presentes en la primera, hecha en apenas cuatro días entre julio y agosto de 2006, pocas semanas después del siniestro que causó 43 muertos y 47 heridos.
Los dos primeros comparecientes han coincidido. Con pocos matices, han calificado la comisión conducida por el PP -que en aquel momento tenía mayoría absoluta en el parlamento- de “comisión exculpatoria”, “paripé” o farsa preparada para “exculpar” al PP y al Consell presidido por Francisco Camps de cualquier responsabilidad.
Las primeras críticas han sido las de Francisco Tomás, exdiputado del PP, en aquel momento en el grupo mixto tras haber abandonado el partido. Ha tachado de “fraude a la ciudadanía” la comisión. Todo “venía todo cocinado de antemano”, el PP carecía de “voluntad de avanzar en el proceso y encontrar conclusiones verdaderas” en una comisión de sólo cuatro días en la que “había prisa por cerrar” los trabajos.
Joan Antoni Oltra, de EU, también fustigó sin piedad la reacción del PP ante “uno de los accidentes más graves de la historia mundial del transporte suburbano”. Más que de investigación “la comisión era de exculpación. Se acortó el tiempo de trabajo en contra del criterio de la oposición, a la que se dificultó el trabajo al máximo”. “El PP se centro en achacar el accidente a la mala suerte y exculpar a su gobierno de cualquier responsabilidad”, ha lamentado Oltra. El exdiputado crítica, además, que tras la comisión “no se pusieron los medios para reforzar la seguridad, que costaban cuatro duros. Es fácil pensar que el accidente se hubiera podido evitar”.
El tercer compareciente fue Andrés Perelló, del PSOE. El exdiputado fue contundente.“Tuve la sensación de que participé en la no investigación de la no comisión”; en una “farsa” o “debería haber miembros del PP encarcelados por falsedad continuidad” en sus testimonios durante la comisión, dijo. El socialista no dejó títere con cabeza. “Es muy duro lo que ha hecho el PP en la Comunitat Valenciana”, en el caso del metro, “un deplorable uso de la mayoría absoluta” con “apropiación indebida del dolor ajeno”.Perelló dejó claro que, a su juicio, muchos miembros del PP en la comisión de 2006 mintieron, cometiendo un supuesto delito de falso testimonio para eludir su responsabilidad. “Todo se hizo para salvar a Camps”, aseguró.
Castellano defiende la labor del PP
Serafín Castellano, exdelegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana y portavoz parlamentario del PP durante la primera comisión, cerró el primer día de comparecencias. Defendió el plan de trabajo aprobado por el PP, lo justificó por la rapidez con que se hizo, pocas semanas después del accidente y recordó que el PP impulsó la investigacion. “No se podía demorar la transmisión de la verdad a los ciudadanos dada la gravedad de lo sucedido y la necesidad de dar respuestas sobre la seguridad del metro”.
“Todo es opinable, pero no voy a entrar en debates sobre la duración de la comision”, dijo Castellano, imputado por supuesta corrupción en la adjudicación de contratos públicos, en respuesta a Podemos. El exconseller no se salió de su guión, radicalmente diferente al de sus predecesores. Negó cualquier montaje para cocinar las conclusiones de la comisión o vetos a comparecencias o peticiones de información: Simplemente, “se siguió el plan de trabajo aprobado por una mayoría parlamentaria”.
En algún momento, incluso contratacó. “No es serio”, dijo, “insinuar todo tipo de irregularidades” en la anterior comisión sin las pruebas pertinentes. “Las conclusiones del PP se basaron en la documentación aportada y las comparecencias efectuadas en esta comisión”. Ana Barceló, diputada del PSOE, negó ese extremo, y acusó al PP de manipular informes de FGV -la empresa pública que gestiona el metro- que fueron entregados sin anexos. El debate entre ambos levantó chispas en algún momento.
Una investigación contra el “ocultismo del PP”
El plan de trabajo acordado por los cuatro partidos que cooperan en este asunto –PSPV-PSOE, Compromís, Ciudadanos y Podemos; el PP votó en contra de iniciar las pesquisas parlamentarias- incluye la petición de 82 informes o documentos y la comparecencia de 70 personas. Con el objetivo de establecer la verdad, reparar a las víctimas y depurar responsabilidades políticas -las penales, de haberlas, se sustanciarían en la causa abierta en un juzgado de instrucción- la comisión investigará,entre otras muchas cosas, el tratamiento informativo que Canal 9 dio al siniestro. También ha llamado a declarar a Camps y Juan Cotino, exconseller y expresidente de las Corts Valencianes.
Está comisión durará seis meses. La diseñada por el PP hace casi 10 años, apenas 15 días.