El 15 de agosto de 2015, justo ahora hace un año, fallecía en Beniarbeig el escritor valenciano Rafael Chirbes a los 66 años de edad víctima de un cáncer de pulmón. El autor de 'En la orilla', un retrato de la España en crisis que le sirvió para conseguir el Premio Nacional de Narrativa en 2014, la televisiva 'Crematorio' o 'París-Auterlitz', una novela publicada después de morir pero que no se puede considerar póstuma ya que la entregó antes de su muerte, todavía tiene material editorial inédito.
Toda esta documentación está inmersa en un largo proceso de selección, siguiendo escrupulosamente las directrices del propio novelista. Así, Manolo Micó, sobrino de Chirbes, anuncia que en unos meses se publicará un 'cuento', titulado así “sólo por su brevedad” y 'El año que nevó en Valencia', así como también se producirá el estreno teatral de 'En la orilla' por la compañía La Pavana y su adaptación al cine.
Echa a andar la fundación
Rafael Chirbes dejó un último deseo antes de morir, la puesta en marcha de una fundación que protegiera sus fondos bibliográficos. Así, la entidad nace de la voluntad del propio autor, “que llevaba tiempo rumiando esta posibilidad”, como reconoce Micó. “Nosotros intentamos seguir esa voluntad”, explica el sobrino de Chirbes. El proceso de constitución de la fundación finalizó hace apenas unas semanas, después de “luchar contra la burocracia”, aunque los responsables del proyecto no han parado de trabajar un instante en estos últimos meses para que echara a andar cuanto antes.
Desde la fundación se están recopilando los estudios, tesis y artículos realizados sobre Rafael Chirbes por todo el mundo, unos trabajos que serán digitalizados para que estén a disposición de los interesados: “Son centenares los que han aparecido en diversos países, por lo que no será un trabajo de unos días”.
Otras acciones en las que ha participado la institución son: la creación de grupos de lectura en la casa de Beniarbeig, con cuyo ayuntamiento se está trabajando en la firma de un convenio o la creación de una beca; el homenaje, con calle dedicada incluida, en Valverde del Burguillo, el pueblo extremeño en el que residió durante unos años el novelista valenciano; las jornadas literarias que tendrán lugar en septiembre en Tavernes, localidad valenciana que también ha decidido darle el nombre de Rafael Chirbes a una plaza; colaboraciones con la fundación Max Aub...
En el recuerdo
Aunque Rafael Chirbes permanecerá en el recuerdo, quienes le quisieron y admiraron siempre echarán de menos “lo mucho que falta por contarnos en su obra”, explica su sobrino, quien apunta que sigue “esperando esa llamada o conversación que durante horas analizaba la actualidad, contaba noticias, discutía de política o te examinaba sobre el texto que días antes te había mandado y que siempre decía que no servía para nada”. “Sin entender nada de literatura, a mí me parecía sobrecogedor sobrecogedor”, confiesa Manolo Micó. “Echo de menos esa faceta de gran conversador, esos análisis de situaciones, ese poder escuchar sus exposiciones sobre cualquier tema...”.
La casa de Beniarbeig
La Fundación Rafael Chirbes se presenta en sociedad con una semana de puertas abiertas -que tiene lugar entre el 14 y el 20 de agosto- en la casa que el escritor poseía en la localidad de Beniarbeig, sede de la entidad. Este lugar fue para el autor “el refugio en el que aislarse y leer, estudiar y escribir, un lugar próximo a los escenarios de su infancia, como Tavernes o Dénia, y de la ciudad que tanto amaba, Valencia”, reconoce Micó.
La casa ha sido reformada y adaptada para acoger esta institución, de forma que ha quedado un salón biblioteca y zona de trabajo en la primera planta y un estudio con biblioteca, dormitorio y cocina en la planta baja a disposición de los investigadores que lo necesiten en su momento. La biblioteca personal del autor valenciano está compuesta por miles de ejemplares que han empezado a ser catalogados.
Además, en una vitrina están expuestas las ediciones de las obras de Rafael Chirbes en castellano y traducciones para países como Francia, Alemania, Suecia, Portugal, Grecia, Estados Unidos e incluso una curiosa edición en chino.
El patronato de la Fundación Rafael Chirbes está formado por los dos sobrinos de Chirbes, María José Micó como presidenta y Manolo Micó como director, y Juan Manuel Ruiz como vicepresidente y albacea cultural. No obstante, el patronato se verá ampliado con amigos del autor, según su propia voluntad. También está pendiente la constitución de un consejo asesor en temas culturales.