Una médica que había sido contratada como refuerzo de verano para el centro de salud del Puerto de Sagunto alertó al servicio de emergencias 112 para que se ingresara de forma forzosa en la unidad de Psiquiatría a un paciente “por ser homosexual” y “un peligro para los niños”.
El caso, que avanza Las Provincias, se produjo el pasado martes y, tras telefonear la médica a emergencias, se presentó la policía, a quien explicó que un paciente suyo “padecía una enfermedad que debía ser tratada por un especialista”. La policía le preguntó por la afección, ante la posibilidad de que se encontrara en una situación de sufrir una agresión, pero esta contestó que “era homosexual” y que se había acostado con otro hombre días antes.
Tras esta denuncia la policía le informó de que podía estar incurriendo en un posible delito de odio por homofobia. La coordinadora del centro de salud, que estuvo presente en la situación, informó al departamento y ha supuesto el despido de la facultativa tras abrírsele un expediente disciplinario.
Además, desde la gerencia del departamento se ha trasladado al paciente la “disculpa” en nombre de todo el área sanitaria, según apuntan desde el departamento dirigido por Marciano Gómez.
El alcalde de Sagunto, Darío Moreno, ha explicado que tras la denuncia de la víctima de haber sufrido un comportamiento se activó automáticamente el protocolo dándose apoyo a la víctima, denunciando el caso ante la fiscalía y comunicándose a la Conselleria. El alcalde ha añadido que la víctima también llamó a diferentes cuerpos de seguridad, pero que de momento todavía no ha denunciado.
Moreno ha señalado que “las actitudes LGTBIfóbicas radicales no tienen cabida en Sagunt. Ahora han saltado las alarmas pero la realidad muestra que todavía hay mucha homofobia y que son necesarias políticas públicas que nos hagan mejorar como sociedad”.