Mislata tendrá conexión con el centro de Valencia con autobuses, aunque finalmente no será la Empresa Municipal de Transporte (EMT) la que preste el servicio, como pedían los vecinos y el alcalde de la localidad, Carlos Fernández Bielsa.
Fuentes de la Conselleria de Obras Públicas han informado este jueves que han alcanzado un principio de acuerdo con la concesionaria Fernanbús para que la línea metropolitana Manises-Mislata-Valencia que finaliza su recorrido en la Gran Vía, lo prolongue hasta el centro de Valencia.
Aunque la propuesta del departamento que dirige María José Salvador era instalar una única parada adicional en las inmediaciones del Mercado Central, desde la Concejalía de Movilidad tienen serias dudas, puesto que están en pleno proceso de remodelación de 12 líneas de la EMT, precisamente para evitar que crucen el centro histórico.
Al respecto, una opcíon sería llevar esta línea a alguno de los intercambiadores que se instalarán en las inmediaciones del centro histórico.
Desde Obras Públicas han comentado que la solución de Fernanbús supondría un coste de 200.000 euros para la Conselleria, algo asumible, tras descartarse la propuesta de recuperación de la línea 7 ofrecida por la EMT que suponía un coste de entre 700.000 euros y 1 millón de euros.
Así, tan solo quedan pulir los útlimos flecos para firmar el acuerdo definitivo, como la ubicación de la última parada o el régimen tarifario, ya que la idea es que sea compatible con el de la EMT. En cuanto a las frecuencias de paso, iría de los 20 a los 30 minutos.
Lo que sí está más avanzado es el convenio entre Obras Públicas y la EMT para que se recupere el servicio en Paterna, Moncada, Alboraya y Vinalesa. El acuerdo por el la Conselleria abonará 200.000 euros a la entidad está pendiente de la aprobación de Intervención de la Generalitat.
Una vez dé el visto bueno, los autobuses rojos volverán a pasar por estas localidades.