La imploración continúa de la Generalitat al gobierno de España para que mejore la financiación de la Comunitat Valenciana, eje de la acción política del Consell presidido por Alberto Fabra, sigue cayendo en saco roto: Madrid no transferirá más dinero.
Apenas seis días después de la revuelta de los empresarios pidiendo más inversiones y mejor financiación, una reivindicación a la que Fabra se sumó inmediatamente, el Ministro de Hacienda ha sido claro: “una financiación autonómica es que el Estado aporte más recursos a las comunidades y eso en este momento es inviable”, ha dicho Cristobal Montoro en una entrevista en El País
El gobierno valenciano, dada la inflexibilidad de sus homólogos de Madrid en ese aspecto, busca fórmulas para que llegue más dinero con el que pagar, al menos, los servicios esenciales, sanidad y educación. Podría ser la entrega de 1.000 millones de euros extra o, incluso, un préstamo sin intereses.
Cualquiera de esas fórmulas se antoja complicada ya que iría contra las cuentas del estado –que también sigue gastando mucho más de lo que ingresa- y crearía agravios comparativos con otras comunidades autónomas. Montoro, mientras, parece que ningunea a Fabra.
Sin fecha para la reunión
Hacienda anunció el domingo que Montoro se reunirá a lo largo de la semana con sindicatos (UGT y CCOO), con empresarios (CEOE y Cepyme), con asociaciones de trabajadores autónomos, con varias ONG (Cermi, Cruz Roja Española o Cáritas) e incluso con la Federación Española de Familias Numerosas. Con todos ellos comentará la reciente reforma fiscal del gobierno.
De la entrevista solicitada con firmeza e incluso agresividad por los empresarios valencianos, nada se sabe. Fabra ha asegurado en varias ocasiones que será en julio. De no celebrarse, la visualización del ninguneo del presidente de la Generalitat en Madrid sería devastadora.