“Estamos hartos. Aquí ni se puede estudiar, ni puede descansar un sábado por la tarde y es una situación que se repite todas las semanas, a veces varios días a la semana. He llamado a la Policía Local hace un buen rato pero de momento no han venido”. Un vecino del entorno del abandonado circuito urbano de Fórmula 1 de València, en la zona recayente a El Grau, se ha mostrado así de indignado ante un nuevo episodio de carreras ilegales, en este caso de motos, y ante la inacción de las autoridades municipales: “Que venga de vez en cuando la Policía no es la la solución. Lo que hay que hacer es impedir la entrada de vehículos motorizados y adecentar la zona, darle un uso ciudadano hasta que se urbanice”.
En concreto, fue este sábado por la tarde cuando un grupo de moteros se concentraron para coger las curvas del antiguo trazado a toda velocidad, generando molestias en forma de ruido a todo el vecindario. Como ha venido informando elDiario.es, esta situación lleva meses produciéndose tanto esta zona como en la Marina de València, en una recta de unos 800 metros al sur del recinto que formaba parte también del circuito.
El vicepresidente de la asociación vecinal de El Grau, Vicente Martínez, ya exigió que se evite el acceso a vehículos en la parte del circuito ubicada junto al cementerio de El Grau y que se habilite un corredor para ciclistas y peatones de forma provisional hasta que se desarrolle el plan urbanístico. “El problema de fondo es el abandono de toda esta parte de la ciudad. Nos gustaba más el plan presentado por el anterior equipo de Gobierno que era un auténtico delta verde, puesto que el actual ejecutivo municipal lo desgaja con viales limitando el acceso peatonal al parque de Desembocadura; en cualquier caso pedimos una adecuación parcial de la zona”, ha comentado.
El circuito urbano está integrado en el programa de actuación integrada (PAI) de El Grau que está en fase de tramitación. El anterior equipo de Gobierno de Compromís y el PSPV propuso la reconversión del trazado en un paseo peatonal biosaludable, pero el actual ejecutivo del PP y de Vox consideró esta opción “un despilfarro de recursos”, por lo que se integrará como los viales de la futura zona residencial.
Actualmente, toda la parte adyacente a El Grau y Natzaret está semivallada, abandonada e incluso ha proliferado un asentamiento de chabolas.
En junio del pasado año la Generalitat Valenciana abonó los últimos 7,5 millones de euros correspondientes al crédito de 60 millones de euros que se solicitó en su día para financiar parte de los costes de la construcción del trazado. El crédito empezó a pagarse en 2016 y tenía una vigencia de ocho años a razón de 7,5 millones anuales. Además, en concepto de intereses se abonaron 6,7 millones de euros, por lo que en total se han devuelto 66,7 millones. El coste total del circuito urbano que el expresidente Francisco Camps prometió a coste cero fue de 98 millones de euros, mientras la Generalitat Valenciana asumió un gasto de 308 millones por los diferentes costes de la organización de las carreras, incluida la construcción del circuito.