Clar que Podem, la candidatura favorita en las próximas primarias valencianas de Podemos, ya tiene su hoja de ruta autonómica a la espera del programa electoral, que se elaborará, en caso de victoria, con la participación de la ciudadanía.
Los “Principios políticos y organizativos” de la corriente apoyada por Pablo Iglesias constan de 53 páginas. Hablan de Comunitat Valenciana o de país –no de País Valencià- y hacen un diagnóstico durísimo del estado de la autonomía y de la responsabilidad del PP y del PSPV-PSOE.
La Comunitat Valenciana es “el coto de una casta valenciana dedicada, por una parte, al saqueo de lo público y, de otra, a su blindaje institucional y a la extensión de potentísimas redes clientelares que han desactivado o, por lo menos, obstaculizado la movilización de la protesta ciudadana.”
Siempre según el documento, “hoy, la imagen de la Comunitat Valenciana está objetivamente deteriorada y se ha convertido en un referente de lo peor: de corrupción, de exceso, de coentor”. ¿Culpables? Por supuesto, el PP, que gobierna la Generalitat desde 1995, pero también el PSPV-PSOE. En “progresiva descomposición”, los socialistas, el “principal partido de la oposición hasta el momento”, han sido “incapaces de articular una respuesta creíble al gobierno ineficaz y corrupto del PP”.
“Dignidad” y una lista propia para la Generalitat
Para cerrar una etapa negra, Clar que Podem apuesta por recuperar la “dignidad como pueblo” abriendo “las instituciones a la participación y al control de la ciudadanía”. De entrada, el programa electoral se hará de forma colectiva y el candidato de Podemos a la Generalitat –si se cumplen los pronósticos, Antonio Montiel- deberá ser elegido en primarias abiertas. El partido, “preferentemente”, concurrirá en solitario a las elecciones, aunque no se descartan, “excepcionalmente”, “ agrupaciones más amplias siempre que se trate de candidaturas ciudadanas y populares y nunca de una suma de siglas”. Es decir, primarias, listas abiertas y un programa elaborado con la ciudadanía en caso de coalición con otros partidos de izquierda. Esa posibilidad parece improbable a día de hoy.
Nuevo modelo de desarrollo
Podemos apuesta por un nuevo modelo de desarrollo “sostenible” en todas sus vertientes (social, política, ambiental y productiva) contra la “cultura del despilfarro” del PP y que supere la actual estructura. Empresarios y trabajadores deben colaborar en un marco dominado por el mercado –“el principal espacio social de la vida económica”- con “dirección estratégica pública”.
Este nuevo mercado debe generar un nuevo modelo productivo que iría acompañado de políticas de bienestar social. El documento – el programa electoral se hará después- no baja a lo concreto, pero si menciona alguna “herramientas” necesarias para conseguir el nuevo modelo de desarrollo: una mejor financiación del estado a la Generalitat, un sistema financiero propio tras la desaparición de Bancaja y CAM y una especie de agencia tributaria propia que colabore con la hacienda estatal.