El vicepresidente de la Generalitat y conseller de Cultura y Deporte, Vicente Barrera, ha defendido la ayuda directa de 300.000 euros que ha concedido a la Fundación del Toro de Lidia para una Liga de Novilladas pese a que no esté residenciada en la Comunitat Valenciana “porque es la única fundación que tiene la experiencia y la capacidad de organizar este tipo de actividad” y ha avanzado que trabajan en otra línea de ayudas para los 'bous al carrer'.
Según ha señalado Barrera en declaraciones antes de participar en la Asamblea de Conpymes, esta liga tiene el objetivo de “vertebrar la cultura del toro en la comunidad” y ayudar a los toreros “más jóvenes” que “menos oportunidades tienen”.
Igualmente, ha señalado que la Valenciana no es la única comunidad que ha tenido que vehicular esta ayuda a través de esta fundación, que ha destacado que no tiene ánimo de lucro, ya que “el dinero evidentemente se va a utilizar para organizar festejos taurinos aquí en la Comunitat Valenciana”.
Barrera ha señalado que su obligación es “el fomento de la cultura, de toda la cultura”. “Yo no dicto la cultura, ni la que me gusta más o menos. Y por supuesto, y como es notorio y legal, el toro, la tauromaquia, es parte de la cultura y está bajo mi responsabilidad, al igual que está bajo la responsabilidad del Ministerio de Cultura en Madrid”, ha manifestado.
Así, ha lamentado que la tauromaquia “nunca” se haya “fomentado” durante 40 años y ha señalado que es su responsabilidad hacerlo igual que “el cine, las artes plásticas, la danza o el teatro”.
Para Barrera, esta línea posibilitará la “vertebración de la cultura taurina en la Comunitat” y facilitará que quien quiera ver toros “pueda tener más cerca de sus casas la cultura del toro”.
Además, ha avanzado que trabaja en ayudas a los 'bous al carrer', una “actividad importante no, importantísima” que “también ha sido abandonada durante muchos años por los anteriores responsables”.
Encierro infantil
Precisamente al hilo de la “cultura del toro en la calle”, ha sido preguntado por el hecho de que su iniciativa de un encierro simulado infantil en Ciutat Vella se vaya a votar en julio justo después de los Sanfermines. Pese a que no ha querido entrar a valorar la fecha, ha defendido que lleva cuatro años proponiéndolo y que se le ha denegado “su libertad”.
“No solo eso, tengo que recordar que no se denegaba solo un encierro simulado, el jugar con carretones con los niños, se me denegaba también hacer una exposición, algo tan peligroso como una exposición de fotografía y pintura taurina. Se me censuraba, y yo, un año más, como siempre dije, iba a defender mi derecho y mi libertad, y un año más, vengo a la Junta de Distrito a proponer una actividad cultural”, ha manifestado.
Barrera ha remarcado que su propuesta es como vecino y no como vicepresidente y ha expresado su deseo que “por fin esa censura que durante cuatro años han mantenido los comunistas de Podemos, los pancatalanistas de Compromís y los socialistas pancatalanistas del PSPV” termine.
En este sentido, ha manifestado que no sabe si le van a decir que sí o que no, pero espera que “la nueva mayoría” en el ayuntamiento (de PP y Vox) entienda que debe “respetar su libertad”.