Con gran expectación y poca autocrítica comparecían en comisión parlamentaria este lunes, casi una década después del accidente de metro que el 3 de julio de 2006 costó la vida a 43 personas y causó heridas a otras 47, el expresident de la Generalitat Francisco Camps -que reaparecía unas semanas después de su última comparecencia pública para desmentir que fuera el 'recaudador del PP' en la presunta financiación ilegal del Partido Popular- y el exconseller y expresidente de las Corts Valencianes, Juan Cotino, -apenas unos días después de que se hiciera pública la petición de 11 años de cárcel de la fiscalía anticorrupción por el supuesto amaño de contratos con motivo de la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia, poco después del siniestro-.
Ambos, al igual que antes había hecho el exvicepresidente valenciano Víctor Campos, han defendido la gestión posterior al suceso prácticamente en todos sus puntos. Estos han sido los aspectos más destacados de sus intervenciones:
Niegan que se produjera 'apagón informativo' en la radio y la televisión públicas. A pesar de que los propios trabajadores del ente público han reconocido la censura, el expresident -tal y como una semana antes había defendido la que fue su jefa de prensa, Nuria Romeral- aseguró que no hubo ni vetos ni consignas de ningún tipo. “Ninguna, nunca, jamás”, ha dicho Camps, quien ha defendido la “transparencia” informativa de su ejecutivo.
Avalan la gestión que del accidente se hizo. Si el exnúmero dos del Consell ha asegurado que se hizo “todo lo que legalmente y humanamente podíamos hacer”, el jefe del ejecutivo valenciano presumió de la rapidez con la que se puso en marcha la primera comisión de investigación -“para no solaparse con la causa judicial”- y con la que se aprobó el decreto de ayudas a las víctimas para agilizar la tramitación y en busca de una “mayor eficiencia”.
Cotino se ofreció a ayudar porque le “dio la gana”. Así lo ha asegurado el exconseller, que ha insistido en que lo hizo, no porque nadie se lo pidiera sino porque así lo decidió, para ayudar a las víctimas “en conciencia”. Camps, por su parte, ha avalado la actuación del que era el responsable de Agricultura porque era la persona que tenía más experiencia en estas labores debido a los cargos que había ocupado con anterioridad: concejal de Policía, director de la Policía Nacional y delegado del Gobierno. Campos también ha defendido la “gran labor y dedicación” de Cotino en una gestión que ha considerado impecable.
Insisten en que no se compró el silencio de las víctimas. El expresidente de las Corts ha apuntado que se ayudó a quien lo solicitó pero que en ningún caso por su silencio: “A nadie le ofrecí nada a cambio de nada”. Al respecto, Campos insistió en que se trató “a todas las víctimas por igual”, sin privilegios de ningún tipo.
Los testimonios “no estaban aleccionados”. A pesar de que Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) contrató a la consultora H&M Sanchis para que aleccionara a directivos y técnicos de la empresa pública sobre qué debían decir en sus testimonios, tanto el president como el exvicepresidente han negado que se dieran instrucciones previas a las comparecencias a nadie. Camps ha ido más allá al asegurar que no conocía qué era H&M Sanchis. “No lo sé, entre comillas, subrayado y con signos de admiración”, ha sentenciado ante las insistentes preguntas de los portavoces parlamentarios. Campos ha apostillado sobre este aspecto que no se dieron instrucciones, “se dio información”.
Cotino dejó de ir a las concentraciones para no “incomodar” a las víctimas. Juan Cotino ha recordado que sí que fue a las primeras concentraciones de las víctimas. Concretamente a las dos primeras, que coincidieron con los funerales que se realizaron en la catedral. Sin embargo, ha dicho que dejó de ir cuando sintió que había familiares a quienes incomodaba su presencia.
Perdón matizado a víctimas y familiares. El expresidente de las Corts, a preguntas de una de las portavoces parlamentarias, ha pedido perdón a las víctimas, pero no por los errores que hubiera podido cometer en la gestión del suceso, sino por si podía haber hecho “algo más”.
Trato con las víctimas. Cotino fue el primero en acudir al lugar del siniestro, mientras que Camps tuvo que suspender un viaje que estaba realizando a causa de lo ocurrido. En un primer momento, estuvieron junto a las víctimas y familiares en hospitales y tanatorios, y Cotino llegó a visitar a unas 35 familias en fechas posteriores, según ha reconocido él mismo. Después, Víctor Campos ha insistido en que se entrevistó con los representantes de las víctimas, y concretamente con su portavoz, Enric Julià, “tantas veces como fui requerido”. En uno de esos encuentros, de carácter privado y en el Palau de la Generalitat, también estuvo el president. Según ha explicado Campos, la iniciativa fue del jefe del Consell, mientras que Camps, posteriormente, ha indicado que fue su exvicepresidente quien le comunicó que estaba reunido con Julià.
Bronca durante la comparecencia de Camps. Durante la intervención de Francisco Camps se han producido momentos de gran tensión, con continuas interrupciones, que han llevado a la presidenta de la comisión, la socialista Sandra Martín, a recordarle al exMolt Honorable que ella dirigía la sesión y a apercibir de expulsión al diputado de Ciudadanos Alexis Marí. Marí, a quien el exjefe del Consell ha asegurado que no conocía, ha calificado de “muy infame” la gestión del Gobierno del PP de este suceso.