El retraso en la fecha de reapertura de RTVV -que ya no será el 9 de octubre con toda seguridad-, pero especialmente que el Consell de PSPV y Compromís no se comprometa a reabrir la futura radiotelevisión autonómica recuperando a los extrabajadores de Canal 9 y Ràdio 9, está haciendo saltar las primeras chispas. Pero estas provienen tanto de los antiguos trabajadores del ente público como de la misma Generalitat Valenciana, como evidenció ayer la presidenta Mónica Oltra.
Como cada viernes los extrabajadores de RTVV se manifestaron ante el Palau de la Generalitat antes de la rueda de prensa del Consell, manifestando que se encuentran a la espera de que el gobierno valenciano les convoque para negociar. Los trabajadores afirman que están abiertos y que no han puesta ninguna línea roja ni en el modelo de RTVV, ni en la cantidad de trabajadores que tiene que haber en el ente, ni en el calendario a seguir.
Pero la vicepresidenta Oltra empezó a marcar distancias aputando a que si no ha habido negociación ha sido responsabilidad de los extrabajadores. Afirmaba así que el Consell envió un correo electrónico a los representantes de los extrabajadores invitándoles a tener una reunión de negociación, pero la vicepresidenta destacó que “20 días después del 'mail' que enviamos, enviamos otro diciendo que seguíamos esperando confirmación de que habían recibido nuestro 'mail'. Se nos envió un teléfono que no contesta a dia de hoy”.
Los dardos de Mónica Oltra no se quedaron en estas palabras. A una pregunta de una periodista en la que se le inquiría sobre si sabe que muchos trabajadores están guardando el dinero de la indemnización por si lo tienen que devolver en caso de ser readmitidos, y si les recomendaba que se gastaran dicho dinero, es decir, si les daba esperanzas de volver a la RTVV, la vicepresidenta no se comprometió y respondió “eso lo tienen que decidir ellos”.
Es más, la dirigente de Compromís quitó 'heroicidad' a la protesta de los extrabajadores recordando que la mayoría firmaron voluntariamente el ERO de extinción de sus contratos, y que por ello cobraron una indemnización de 38 días por año trabajado. Esta misma postura la defendía Oltra afirmando que “lo entiendo, tienen familias”, mientras que a la vez recordaba que los trabajadores del sindicato CGT no aceptaron el ERE, no firmaron, y sólo recibieron 20 días de indemnización por año.
La última china lanzada por Mónica Oltra a los extrabajadores fue la de cuestionar como “comité de empresa” a sus representantes, puesto que ya no son trabajadores de RTVV. No obstante afirmaba que los extrabajadores son libres de elegir quienes son sus representantes, y que el gobierno valenciano se reúne con todos los colectivos que se manifiestan ante la Generalitat.
Finalmente la vicepresidenta valenciana también advirtió que la Generalitat Valenciana no puede cambiar la ley y que el ERE se finalizara el 30 de junio, porque “eso hubiera sido prevaricar, y si prevaricamos no inhabilitan”.