La sangría que sufre Ciudadanos es un proceso largo, agónico y en el que cada día se suma una puñalada más. Al cupo de tránsfugas que han abandonado el partido y se han aferrado al acta en las Corts Valencianes esta semana se han sumado sus representantes en las diputaciones. El lunes Javier Gutiérrez, diputado en Alicante, que tenía un expediente de expulsión ya casi metido en el buzón del correo, dejaba el partido y se pasaba al grupo de no adscritos en la corporación que preside Carlos Mazón, presidente del PP autonómico y candidato a la Generalitat Valenciana. El martes, el equipo de Mazón afirmaba que no piensa retirarle sus competencias. Este miércoles, con la cúpula del partido desplazada al sur para hacer un gabinete de crisis, el exsecretario de Organización en Valencia, Juan Córdoba, hacía lo mismo en la Diputación de Valencia. Dos tránsfugas en 48 horas.
El coordinador nacional de Ciudadanos, Carlos Pérez-Nievas y la portavoz en las Corts Valencianes y candidata a la Generalitat, Mamen Peris, se reunían este miércoles en Alicante con la diputada provincial Julia Parra, la única representante con carnet del partido en la Corporación provincial. Al menos, hasta que pase el fin de semana. La reunión tenía como objeto trasladarle a Parra, vicepresidenta segunda de la Diputación, la postura oficial del partido respecto a su excompañero. Y lanzar además un aviso al PP: “El lunes esperamos que Javier Gutiérrez no tenga ninguna responsabilidad en la Diputación de Alicante. Si eso no ocurre, damos por roto el pacto”, apuntaba Pérez-Nievas, añadiendo: “Le hemos comunicado a Julia Parra que tiene la obligación de asumir esa realidad”.
Los naranjas exigen al presidente del PP valenciano y de la Diputación que cese al diputado tránsfuga. Le recuerdan el pacto de gobierno se suscribió con Ciudadanos y que es en virtud de ese acuerdo que Gutiérrez ostenta responsabilidades. Los representantes recalcan que Gutiérrez es “un tránsfuga y un corrupto” y le reclaman a Mazón que le retire las competencias. “¿El que quiere ser candidato a la Generalitat, va a acabar gobernando con tránsfugas, sí o no? ¿Va a revivir cómo Zaplana llegó a la alcaldía de Benidorm?”, plantea Mamen Peris, recordando que Mazón creció al calor político del expresidente de la Generalitat imputado por corrupción. Mientras tanto, Carlos Mazón estaba visitando fallas con la candidata del PP a la alcaldía de València, María José Catalá, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida.
El ultimátum de los naranjas a Mazón puede dejarlos sin representación en la Diputación de Alicante y tener un efecto dominó, como ha ido ocurriendo cuando se han producido otras marchas. De hecho, parece tener ya su réplica en la Diputación de Valencia, donde Ciudadanos y el PP ocupan la oposición. “Es una situación claramente orquestada”, ha denunciado Pérez-Nievas, en referencia al último en engrosar la lista de tránsfugas, Juan Córdoba, que fue diputado en el Parlamento autonómico la pasada legislatura y secretario de organización en Valencia. El también concejal en Paterna, en declaraciones a Las Provincias, ha expresado: “Dejo Ciudadanos. He salido de una guardia en el hospital y ahora me iré al partido a pedir la baja. La dirección nacional y Mamen Peris están convirtiendo a Ciudadanos en un partido que parece bolchevique Justo antes de extinguirse. Tendríamos que morir con dignidad y no vendiéndonos a Ximo Puig por un plato de judías”.
Los naranjas cuentan aún con una diputada provincial en Alicante, que no genera demasiada confianza, dadas sus manifestaciones de apoyo a Gutiérrez, y dos diputados más en Valencia: los concejales en Moncada, Jesús Gimeno; y en Valencia, Rocío Gil. Gimeno fue representante del PP en Moncada y ha sido investigado, junto a ese equipo municipal, por presunta estafa en 2013. Si se rompe el pacto, Parra perdería su cargo de vicepresidenta segunda de la Diputación de Alicante.