Claves de la rebaja fiscal valenciana: deducciones y menos cuota en el IRPF para 100 euros de ahorro medio en la declaración de la renta

El Gobierno valenciano ha aprobado este lunes el decreto ley que modifica los tramos autonómicos del IRPF para rebajar la declaración de la renta a 2,3 millones de personas. El pleno del Consell ha validado en una sesión extraordinaria la rebaja fiscal anunciada por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que tendrá carácter retroactivo y se materializará en la próxima declaración de la renta. El mismo pleno ha aprobado el anteproyecto de ley de medidas fiscales, que se debatirá en las Corts Valencianes junto a los Presupuestos de 2023.

La rebaja ya aprobada afecta a los contribuyentes con rentas inferiores a los 60.000 euros al año y concentra el ahorro en quienes ingresen menos de 30.000 euros anuales. El objetivo de la reforma es mitigar el impacto de la inflación sobre las rentas del trabajo para que los impuestos graven la riqueza real y el aumento de precios no perjudique a los contribuyentes. Para las rentas superiores a 60.000 euros no habrá ajuste en el tramo autonómico del IRPF; se mantendrán este año.

La medida, que tiene como contrapartida una subida de impuestos a los grandes patrimonios en el próximo año, según ha indicado la vicepresidenta Aitana Mas, supondrá un ahorro medio de 111 euros por contribuyente para 1,3 millones de personas, mientras que otras 962.000 pasarán a tener cuota cero (y estarán exentos de declarar). Los cálculos de la Conselleria de Hacienda indican que se beneficiarán el 97% de los declarantes en la Comunitat Valenciana: 2,3 millones de los 2,41 que tributan. En términos globales, la rebaja supondrá una merma en la recaudación de entre 148 y 180 millones de euros, una horquilla que va en función de quienes soliciten las nuevas deducciones por hipoteca y por tratamientos de fertilidad.

El conseller de Hacienda, Arcadi España, ha defendido en la rueda de prensa posterior al pleno que la caída en la recaudación fruto de esta reforma no implicará recortes. El conseller socialista ha indicado que la Generalitat recaudó el último año cerca de 4.400 millones de euros a través del tramo autonómico del IRPF -donde va a producirse la rebaja- y 2.800 millones de euros con los tributos propios, por lo que considera que hay cierto margen para aliviar la carga fiscal. “Usamos la política fiscal para hacer política social”, ha apuntado España.

La rebaja fiscal se compone de varias medidas: una bajada en los tramos autonómicos del IRPF, un aumento de la cantidad y de los supuestos a deducir y un aumento del mínimo exento de tributación. En concreto, se ha aprobado un incremento del 10% de los mínimos exentos personal y familiar; así como un aumento del 10% en el importe de todas las deducciones autonómicas y de los límites de renta para acceder a ellas. El decreto reduce el tipo inferior de la tributación del 10% al 9% y mantiene el tipo más elevado en el 29,5% actual. Además, introduce un tramo impositivo adicional para aumentar la progresividad de la escala y su efecto redistribuidor de la riqueza, por lo que la nueva escala contará con un total de 11 tramos distintos de tributación frente a los 10 actuales.

Nuevas deducciones fiscales

El Ejecutivo autonómico ha modificado las deducciones fiscales y ha introducido nuevos elementos para rebajar la factura en la declaración de la renta. En líneas generales, aumenta un 10% el importe de todas las deducciones existentes, así como un 17,3% los límites de renta para acceder a ellas. En las declaraciones individuales se elevan los límites de 25.000 a 30.000 euros; mientras que en las declaraciones conjuntas los límites de renta pasan de los 40.000 actuales a los 47.000 euros para poder ser beneficiario de las deducciones.

Además, se refuerzan especialmente las deducciones vinculadas a facilitar el acceso a la vivienda y para atender la emergencia habitacional, afectada por el fuerte incremento del precio de la vivienda. De esta forma, en el caso de las deducciones por alquiler de vivienda habitual se elevan de 700 a 800 euros con carácter general y de 850 a 950 euros en el caso de menores de 35 años, discapacidad o víctimas de violencia de género. Cuantía que se elevará hasta un límite de 1.100 euros en el caso de que se reúnan dos de estas condiciones.

Igualmente, se aumentan los límites en el caso de mejora u obras de sostenibilidad y accesibilidad en las viviendas hasta los 5.500 euros; así como por las inversiones en instalaciones de autoconsumo y energías renovables, que se aumentan hasta un máximo de 8.800 euros frente a los 8.000 euros actuales. Para esta última deducción el decreto ley contempla una simplificación de los requisitos para promover el autoconsumo y la instalación de renovables.

La nueva reforma fiscal incluye también dos nuevas deducciones fiscales como son el acceso a la reproducción asistida para mujeres de entre 40 y 45 años que no estén recibiendo tratamiento de la sanidad pública hasta un máximo de 100 euros, así como la ayuda para hacer frente al incremento de los tipos de interés en el último año en hipotecas suscritas a partir del 1 de enero de 2014, hasta un máximo anual de 100 euros.