Esquerra Unida sigue dividida y sin dirección a un año de las municipales y autonómicas

El pasado 24 de febrero, los militantes de Esquerra Unida elegían a la mitad de los representantes de su Consell Polític Nacional (CPN) -60 miembros de un total de 120, aunque inicialmente debían ser 125-. La candidatura de Rosa Pérez Garijo, afín a la dirección federal de Izquierda Unida de Alberto Garzón, se imponía por un estrecho margen (30 puestos en el CPN a 26) a la lista continuista respaldada por el PCPV con Rosa Albert a la cabeza -el número dos de la candidatura lo ocupaba el controvertido David Rodríguez, cuestionado como coordinador general de la formación después de su polémico viaje a Cuba con motivo del funeral de Fidel Castro financiado con fondos públicos de la Diputación de Alicante-.

Sin embargo, los cuatro representantes obtenidos por el alcalde de Polinyà de Xúquer, Òscar Navarro, candidato afín a Glòria Marcos, provocaron un empate entre las dos opciones mayoritarias e impidieron la elección de una nueva coordinadora general. Había que esperar a conocer a los representantes comarcales en el Consell Polític Nacional. Los procesos que se desarrollan en las 27 comarcas valencianas y que permitirán la elección de los 60 miembros que faltan del Consell Polític Nacional -comenzaron a realizarse el pasado miércoles, más tarde de lo inicialmente previsto- deben finalizar el próximo 26 de abril.

De este modo, el próximo 28 de abril está previsto que se reúna el Consell Polític Nacional, ya con la totalidad de sus 120 representantes electos. Ellos serán quienes decidan entre Rosa Pérez Garijo y Rosa Albert para liderar la nueva etapa de Esquerra Unida, que tiene en el horizonte las próximas elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2019. De momento, el equilibrio de fuerzas se mantiene, y también la incógnita sobre quién dirigirá la coalición de izquierdas en el próximo ciclo electoral. EUPV vive en una situación de interinidad e inestabilidad desde hace seis meses, cuando David Rodríguez perdió la confianza de su ejecutiva, que incluso llegó a exigir su renuncia. Actualmente, está en manos de una gestora.

Los siete miembros que forman la comisión coordinadora que actúa de gestora son: Rosa Pérez Garijo, Aurora Mora, Luis Poveda, Rosa Albert, Amadeu Sanchis, Roberto Rovira y Estefanía Candel, con un equilibrio de tres representantes para cada una de las dos sensibilidades mayoritarias y una del sector de Glòria Marcos.

'Voluntad' integradora

Aunque los sectores mayoritarios -Rosa Pérez y Rosa Albert- hablan de la necesidad de una nueva dirección en la que estén integradas todas las sensibilidades de Esquerra Unida, lo cierto es que, a día de hoy, todavía no hay un acuerdo al respecto.

Pérez Garijo explicaba a eldiario.es que ha hecho llegar una propuesta de acuerdo a Albert para formar una ejecutiva “integradora” que estaría compuesta por doce miembros de su candidatura (la que obtuvo más apoyos en el proceso del pasado mes de febrero) y once de la lista 'oficialista', una dirección en la que la diputada provincial y concejal de Catarroja ocuparía el cargo de coordinadora general como candidata más votada. Pérez también apuntaba que su intención es negociar con el tercero en discordia, Navarro, que podría tener la llave de la nueva ejecutiva de EUPV.

Sin embardo, Albert aseguraba, en declaraciones a eldiario.es, que “oficialmente” no le ha llegado ninguna propuesta y que todavía no existe “ninguna negociación”. La exedil valenciana se muestra abierta al diálogo aunque prefiere esperar a conocer los resultados de los congresos comarcales antes de cerrar ningún acuerdo: “hay que ser respetuoso con lo que elija la militancia, y aún no ha acabado el proceso”.

A pesar de que ambas posturas siguen alejadas, tanto Pérez como Albert abogan por la vía del diálogo para intentar formar una dirección de consenso, ya que no creen que los resultados de los congresos comarcales varíen mucho el actual equilibrio de fuerzas. “Hay que darle estabilidad a la formación”, sostienen.

'Intervención' de la dirección federal

Desde el sector de Rosa Albert denuncian la “intervención” que aseguran que se ha producido desde la dirección federal de Izquierda Unida, que apuntan les ha aplicado “un 155”. Se refieren al “cambio en las normas de juego”, por lo que respecta al número y reparto de los representantes comarcales en el Consell Polític Nacional. “Las normas fueron aprobadas con un respaldo mayoritario del 90%”, explican, para advertir que podrían recurrir el Consell Polític, si finalmente se celebra el 28 de abril: “habrá que verlo”.