El juicio de la Gürtel abre en canal al PP de Camps, Aznar y Rajoy

La declaración de Álvaro Pérez El Bigotes en el juicio por la financiación ilegal del PP valenciano pasará a la historia de las causas de corrupción por ser la que mejor ha retratado una manera de hacer política que se convirtió casi en hegemónica en España. El comercial de la trama Gürtel en Valencia y número tres del entramado ha encendido el ventilador y ha salpicado prácticamente a todos aquellos que tuvieron algún peso específico en el PPCV, muchos de ellos también en el Partido Popular nacional, entre los años 2003 y 2015. En casi tres horas de interrogatorio, ha implicado en la red de financiación irregular a dos expresidentes de la Generalitat, Francisco Camps y Alberto Fabra, y al exdirector general de la Policía Nacional con José María Aznar y expresidente del parlamento valenciano, Juan Cotino.

Todavía se recuerdan aquellas declaraciones del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en València tras estallar el caso Gürtel y salpicar al otrora presidente de la Generalitat, Francisco Camps: “Paco, estoy contigo. Estaré siempre delante, detrás, a tu lado”. Eran los tiempos en que el PP negaba la mayor y aseguraba que la trama corrupta era contra su partido, un “grupo de golfos” que se habían aprovechado de los populares.

Pues nada más lejos de la realidad. Según el interrogatorio al que han sometido a El Bigotes tanto la Fiscalía como la Abogacía del Estado, Álvaro Pérez retrata la Gürtel valenciana como una operación para financiar ilegalmente al PP montada y orquestada por Francisco Camps y donde sus consellers Juan Cotino –imputado en la pieza separada de la visita del Papa- y José Ramón García Antón –ya fallecido- habrían sido los recaudadores. Las dos personas que decían a los empresarios que había que pagar los actos del PP que realizaba Orange Market.

Álvaro Pérez ha explicado que el PP valenciano tenía tres formas de abonar los actos, es decir, de financiarse. Una a través de pagos en dinero negro (la famosa caja B), una segunda con ingresos de los empresarios que han reconocido los delitos, y una tercera oficial. “Camps y su jefa de gabinete Ana Michavila –hermana del exministro de Aznar José María Michavila- eran los que daban las órdenes de cómo y cuándo pagar. No se movía nada en València sin que ellos lo supieran”, ha declarado. Además, ha apuntado, “para cobrar había que hablar con Juan Cotino, que mediaba con los empresarios”. El Bigotes ha afirmado que también intercedía con los patronos José Ramón García Antón, que fue consejero de Obras Públicas.

Son importantes estos dos nombres porque García Antón y Juan Cotino eran los que mayor presupuesto tenían para adjudicar obras públicas y contratos en residencias de mayores, donde todos los empresarios confesos tenían intereses millonarios. La puerta de la financiación a cambio de contratos públicos no está siendo investigada en esta pieza separada y sería la que podría forzar a investigar un delito de malversación de caudales públicos. Su prescripción se cumplirá este año 2018.

El comercial de la Gürtel ha apuntado hacia Camps y ha aprovechado para exculpar a varios de los acusados en esta pieza. “Costa recibía órdenes. No tenía relación con los empresarios. Esto lo decidía el señor Cotino, García Antón o Camps”, ha manifestado. También ha salvado al exvicepresidente de la Generalitat Vicente Rambla, de quien ha dicho que “no se mojaba”. “Lo tiras al agua y sale seco”, ha ironizado.

Álvaro Pérez, que ha dicho que el viernes es el primer día que lo declara “todo”, ha apuntado que también acudió a la sede del PP a cobrar dinero en metálico. “Recogíamos sobres de la sede del PP. Me dieron dinero en metálico David Serra –acusado en esta pieza- y Víctor Campos- exvicepresidente del Consell y condenado en la causa de los trajes”, ha dicho.

Alberto Fabra, salpicado

Por la mañana, el contable de la trama Gürtel, Pablo Crespo, ha implicado al sucesor de Francisco Camps y actual senador del PP, Alberto Fabra. “Fuimos a cobrarle a Alberto Fabra [entonces candidato a la alcaldía] y nos dijo que no nos pagaba porque el acto era autonómico. Como en el PP regional también se negaron acabamos cobrando de Piaf, una empresa de Castellón”, ha explicado.

El del expresidente de la Generalitat y actual senador del PP es el único ejemplo concreto de actos y empresarios que ha puesto. El contable de la Gürtel ha añadido que sabían que “los actos del PP que hicimos se los teníamos que cobrar a los empresarios”.

Las declaraciones de los dos cabecillas de la trama han dejado patas arriba a el PP más poderoso del que bebieron José María Aznar y Mariano Rajoy. El vía crucis sigue para Francisco Camps, que debe declarar como testigo en esta pieza separada del caso Gürtel. Podrá negar todo lo que ha dicho este viernes El Bigotes. ¿Y lo que dirán Ricardo Costa y Vicente Rambla la semana que viene?

El caso Gürtel se ha convertido en una bola incontrolable para el PP.