El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha aprovechado este 25 de diciembre, día de Navidad, para valorar sus primeros seis meses al frente del Consell en una entrevista con Julián Giménez en Radio Valencia de la Cadena Ser. Uno de los principales asuntos abordados por el también líder de los socialistas valencianos ha sido el de la financiación autonómica.
Precisamente, ha anunciado que una de las primeras medidas que llevará a cabo a comienzos de año será convocar en el Palau de la Generalitad a todos los diputados y senadores valencianos -una vez hayan recogido sus actas- para presentarles la propuesta del Gobierno valenciano en el tema de la financiación y exigirles que cumplan sus programas electorales (en los que estaba reflejada la mejora de la financiación), “queremos que actúen como valencianos y que aporten ese plus de valencianismo que necesita la Comunitat Valenciana”.
Puig ha insistido en que el día a día todas las decisiones están “condicionadas” por la infrafinanciación y los 16.000 millones de deuda histórica, “no podemos ofrecer a los valencianos los servicios básicos que se merecen”, por lo que ha apuntado que aunque “no es el único”, la mejora de la financiación sí que es una cuestión “básica y fundamental” que debe figurar en la agenda del nuevo Gobierno de España. “Es una cuestión de equidad hacia casi cinco millones de españoles que estamos discriminados, con menos posibilidades y menos oportunidades”, ha puntualizado.
RTVV
El president, aunque ha preferido no aventurar fechas, se muestra confiado en que antes de que acabe 2016 esté en marcha la nueva Radio Televisión Valenciana, “espero y deseo que 2016 sea el año en que se recuperen las emisiones. Hemos aprobado la ley que permite volver a tenerla, porque el PP se encargo de impedirlo”. A su juicio, “es muy importante que haya una RTVV independiente y de calidad que sirva para unir a los valencianos y para dinamizar el sector”.
Respecto a los conciertoes en educación y sanidad, Puig cree que la iniciativa privada tiene cabida en la gestión de lo público, “pero la dirección no puede estar privatizada. Las decisiones se tienen que tomar desde lo público”, al tiempo que comentaba que hay que explorar otras posibilidades, como el cooperativismo, siempre encaminadas a mejorar el servicio al ciudadano.
Corrupción y mala gestión
En cuanto a la 'herencia recibida', Puig se ha referido a que ha habido corrupción en el pasado, “y ante la menor duda, se informa a Fiscalía”, así como recordaba que se ha creado un grupo para “recuperar todo lo robado”. No obstante, ha llamado la atención en que, sobre todo, ha habido una ineficiente gestión de los recursos públicos, y ha destacado algunos ejemplos como Feria Valencia, “que pasó de 300 a 600 millones de euros y nos va a acabar costando a los valencianos 1.000 millones”, o la Ciudad de la Luz, “que nos costó casi 400 millones y ahora la tenemos que vender por 19, aunque todavía lo estamos negociando”.
También ha resaltado el caso de los 500 millones de euros en IRPF de los trabajadores de la Generalitat que el Gobierno de Alberto Fabra dejó a deber a la Agencia Tributaria, y que se traducen en 52 millones en intereses, “no es serio que se aplace el pago y esto devengue en 52 millones por una mala gestión, pero nosotros somos un gobierno serio”.
Gobierno de la Generalitat y Gobierno de España
El president ha valorado la estabilidad del Consell surgido del 'Acord del Botànic', que puede sufrir algún reajuste en el futuro aunque “no está sobre la mesa”, y ha reseñado que es un modelo exportable a Madrid, “exportable el diálogo y el acuerdo, ya que somo un ejemplo en positivo, ya que actuamos cohesionados. Hemos demostrado que la política de coalición es positiva, aunque nosotros no estamos para dar lecciones a nadie”.
Precisamente, al nuevo gobierno de España, el jefe del Consell le exige “lealtad” y “equidad”, que “atienda nuestras demandas y cumpla con los valencianos, sea quien sea su presidente y su composición. Nosotros hemos dicho basta a la sumisión y vamos a ser leales pero exigentes”, después de los que ha considerado “los peores cuatro años de la historia”.7
Balance de estos seis meses
Por último, Puig -quien ha indicado que lo que le “quita el sueño” es que haya valencianos que no puedan comer dignamente- ha valorado los primeros seis meses de su Gobierno, “estoy orgulloso de las políticas sociales que hemos llevado a cabo, dirigida a los problemas más graves de la ciudadanía. Hemos propiciado la gratuidad de los libros de textos, universalizado la sanidad, luchado contra la pobreza energética... Hemos recuperado la dignidad y la credibilidad perdida, pero me hubiera gustado hacer más”.