“El plan de la izquierda de acabar con la educación concertada pone en peligro más de 29.000 empleos, el futuro de 700 empresas y afectaría a 450.000 ciudadanos” de la Comunitat Valenciana. El PP ha salido en tromba en defensa de la educación concertada justo cuando un juzgado investiga irregularidades en la gestión de la escuela privada financiada por fondos públicos.
Por ello, la coordinadora general del PP valenciano, Isabel Bonig, partipado junto al presidente del PP de Alicante, José Císcar, en una jornada celebrada en Alicante de respaldo al mantenimiento de los conciertos educativos. Bonig asegura que el PP defiende la enseñanza pública y concertada “porque son perfectamente compatibles y porque conforman un sistema educativo de éxito muy valorado por la sociedad valenciana”. La número 2 del PP valenciano ha lamentado que las formaciones de izquierda “quieran limitar la libertad de los padres para elegir colegio”.
La dirigentes popular ha insistido en que el PP “es el único partido que garantiza la libertad de los padres para elegir centro y modelo educativo para sus hijos”, mientras que la izquierda “tiene en su ADN la restricción de las libertades de las personas y en este caso amenazan la posibilidad de optar por un modelo u otro”.
“Su único interés por la educación es utilizarla como instrumento para la demagogia y el sectarismo, y para hacer guerra política contra el Gobierno y contra el PP. Como en casi todo, la opinión de los ciudadanos no les interesa”, asegura.
450.000 afectados
Bonig ha advertido de que el fin de los conciertos educativos “afectaría directamente a 450.000 valencianos que verían limitada su libertad para decidir sobre la escolarización de sus hijos”, pero además, “más de 29.000 puestos de trabajo estarían en peligro y más de 700 empresas verían comprometido su futuro”.
Ha destacado que tanto Compromís como EU llevan en su programa electoral acabar con los conciertos educativos, que Podemos también se ha pronunciado en esta línea y que el PSPV “juega a la confusión, amagando un día con un silencio cómplice y al otro hablando abiertamente de eliminar los conciertos educativos”.
Frente a eso, la dirigente popular ha avanzado que “uno de los ejes en los que se va a basar el programa electoral del PP es la libertad, en todos los sentidos, y por tanto, también la libertad de elección de centros educativos por parte de los padres”.
En opinión de Bonig, la gente “tiene el derecho a saber quien apoya la escuela concertada, quien defiende con hechos la escuela pública, y por el contrario quienes, como la izquierda valenciana, sólo tratan de usar la educación como arma arrojadiza porque es la única forma de hacer política que conocen”.