El inicio del año, el tercero con el Gobierno del Botánico, viene marcado por la puesta en marcha de la nueva radiotelevisión valenciana. En enero acaba el plazo de presentación de proyectos para dirigir la corporación (CVMC) y desde la comisión en les Corts se ha comenzado a elaborar el mandato marco, texto base para el desarrollo del ente. El documento se aprueba por las Corts y establece las líneas básicas del sistema audiovisual. El pasado mes el Consell Rector envió su propuesta a la comisión para que sobre ella se redactara el texto definitivo, aunque el PP ya anunció que presentaría un texto alternativo al no estar de acuerdo con que sea la corporación quien desarrolle su propia regulación.
Los objetivos del mandato marco son revisables cada seis años, aunque pueden prorrogarse durante dos, mientras se elabora el siguiente. Una vez aprobado, los propósitos se concretan en un contrato programa cada tres años. Resulta llamativo, como criticaba Ciudadanos, que los procesos para designar un director, cuyo proyecto debe tener en cuenta el mandato marco, y el propio mandato se desarrollen en paralelo.
La propuesta del órgano rector determina que el primer objetivo es el desarrollo de la calidad informativa, el pluralismo y la igualdad entre hombres y mujeres. Para ello, se debe promover el espacio comunicativo propio del ámbito lingüístico. Esta denominación, que no gusta nada a PP ni a Ciudadanos, promete traer cola en el debate del documento, que se centra en la promoción de la lengua y la cultura valenciana y los valores reflejados en el Estatut de Autonomia. Además, aboga por el uso del lenguaje no sexista y evitar ofrecer una visión estereotipada de hombres y mujeres, así como proteger los derechos de la infancia y la juventud. Todo ello se recogerá en un libro de estilo para los periodistas, que tendrá que estar listo en dos años máximo.
La nueva plataforma deberá favorecer la cohesión social, para lo que debe garantizar que los ciudadanos de diferentes zonas y grupos sociales se entiendan entre sí y promover la participación de los mismos en los medios de comunicación. Para garantizar la independencia y profesionalidad de los trabajadores, especialmente de los periodistas, establece una “remuneración digna”, que no se detalla.
La divulgación de la cultura y, en general, del conocimiento ocupa uno de los apartados de la propuesta del Consell Rector. En él incluyen, a parte de garantizar el acceso a contenidos culturales y la labor pedagógica intrínseca a los medios de comunicación -como informadores sobre acciones políticas, sociales, económicas y otras propias del entorno en el que actúan-, reforzar la identidad valenciana y proteger la memoria histórica. Asimismo, indica que debe huir del centralismo típico de muchos medios de comunicación y reflejar la diversidad local y comarcal de la Comunidad. Se especifica además la ayuda a la producción valenciana, con un mínimo del 35% de tiempo anual de emisión que provenga de empresas valencianas y producción original en valenciano, al margen de subtítulos y doblaje.
El documento refleja y reflexiona sobre el paso a la economía digital y a las nuevas formas de consumir productos audiovisuales, cuestión que parecía olvidada en los debates sobre la nueva corporación. Considera el Consell Rector que el nuevo ente debe abanderar el proceso de cambio y desarrollar contenidos multiplataforma, así como aprovechar el carácter participativo de las redes sociales.
Respecto a la financiación, la corporación plantea un sistema mitxto: aportación directa de la Administración e ingresos por venta de contenidos y espacio publicitario. Es decir, habrá anuncios en la nueva radiotelevisión valenciana. Para 2017, año en el que se prevé que se ponga en marcha el nuevo ente, la Generalitat aportará cerca de 80 millones de euros; 55 presupuestados más los 28 no ejecutados del presupuesto anterior. Los criterios en base a los que se adjudique el espacio publicitario (contenido, tiempo y franja horaria) se determinarán en el contrato programa.
Contrato programa
Este texto normativo desarrolla con más detalle los objetivos establecidos en el mandato marco. Será revisable cada tres años y pactado entre la CVMC y el Gobierno de la Generalitat.
El contrato detallará las inversiones anuales, las compras que realice la corporación, los indicadores de gestión y los medios que necesite. Indicará además las obligaciones concretas de cada canal de televisión y radio y de los servicios interactivos, así como sus contenidos. En otras palabras, la programación detallada.
Debe reflejar el porcentaje destinado a promover el doblaje y a la producción audiovisual valenciana -al margen de lo que destine a la producción europea, un 6% obligatorio para los operadores públicos-. Asimismo, tendrá que establecer las sanciones o acciones en caso de incumplirse el contrato.