El año 2018 se produjo un repunte de las licencias de armas cortas de fuego en España, las calificadas como tipo B y que incluye tipos como los revólveres o las pistolas. Este incremento ha llevado a un total de 8.459 licencias expedidas rompen una tendencia a la baja desde 2013, cuando hubo 8.864 y descendiendo correlativamente a 8.747 en 2014, 8608 en 2015 , 8214 en 2016 y 7.846 en 2017.
Esta es la cifra ha sido facilitada por el gobierno al senador Carles Mulet (Compromís), cifra que considera “escandalosa”. Este tipo de licencias solo pueden ser expedidas a quienes tengan necesidad de obtenerla y la competencia para concederlas es de la Dirección General de la Guardia Civil; tienen tres años de validez y nadie puede poseer más de una licencia B y cada una no ampara más de un arma.
Por provincias los últimos datos desglosados ofrecidos en la respuesta son de 2017 muestran en primera posición a Madrid con 2.426, seguida muy de lejos por Murcia con 436 licencias, Barcelona con 358 y Granada 309. La provincia de Alicante se sitúa la 19ª con 98 licencias, València, pese a ser una de las provincias más pobladas se queda en la 31ª posición con 49 licencias y Castellón la 45ª con 23 licencias.