El Pleno del Ayuntamiento de València aprobó este jueves por unanimidad la iniciativa para la construcción y explotación de un pabellón deportivo multiusos en una parcela de propiedad municipal ubicada en las calles Ángel Villena, Bomber Ramon Duart y Antonio Ferrandis, mediante una concesión a 50 años.
Una infraestructura que saldrá a concurso público, pero que cuenta con Juan Roig, propietario del Valencia Basket, como firme candidato para su ejecución, hasta el punto de que ha constituido la empresa Licampa 1617 para llevarlo adelante.
La firma ya ha presentado al Consistorio un proyecto que cuenta con una inversión de 192 millones de euros para la construcción de un pabellón con capacidad para 15.000 espectadores y con un aparcamiento subterráneo de 1.500 plazas.
Sin embargo, su ejecución no resultará tan sencilla como a priori podría parecer. Según ha averiguado eldiario.es, el proyecto prevé una importante afección al colegio público de infantil y primaria Les Arts, ubicado en la parcela contigua, que cuenta con 300 alumnos de 2 a 12 años.
Y es que, parte del aparcamiento subterráneo estará bajo el centro educativo por lo que las obras obligarán a trasladar durante algunos meses a una parte de los alumnos, o incluso a la totalidad. Para ello, una de las opciones que se barajan es habilitar a unos barracones que estarían perfectamente acondicionados.
A cambio, los promotores del proyecto acordarán con al colegio, construirán un colegio prácticamente nuevo, tal y como informaron este jueves.
Al respecto, la presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA), María José Martínez, ha confirmado que el pasado 17 de julio mantuvieron una reunión en la que les comunicaron que las obras del parking podrían afectar temporalmente al centro: “nos dijeron que estudiáramos posibles contraprestaciones y que se las trasladáramos en una próxima reunión que habrá en septiembre”.
Martínez ha confirmado que se les trasladó la posibilidad de los barracones como una opción y ha avanzado que el AMPA solicitará como condición la rehabilitación integral del centro.
La representante de las madres y padres del colegio se ha mostrado optimista sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo ya que “las relaciones con el Valencia Basket son muy buenas, siempre han ayudado en todo lo que se les ha pedido”. En este sentido, ha recordado que las obras de la Alquería del Basket también afectaron al centro y luego “todo quedó subsanado”.
Por su parte, fuentes del equipo directivo del centro se han expresado en los mismos términos: “el parking subterráneo coge parte de la parcela y nos dijeron que si era necesario se podían habilitar aulas prefabricadas y que lo que tuvieran que tocar del centro lo harían nuevo”.
En cualquier caso, han recordado que el colegio depende de la Conselleria de Educación y que en todo caso será la administración la que tenga la última palabra.
Al respecto, desde el departamento que dirige Vicent Marzá se han limitado a decir que una vez haya un proyecto consolidado se analizará: “cabe la posibilidad de que haya una afección y si se produce de forma consensuada y colaborativa se estudiarán las mejores condiciones”.
Por su parte, fuentes de Licampa han preferido no pronunciarse sobre los barracones ya que han asegurado que aún no está cerrada la alternativa que se dará a los alumnos mientras duren las obras, algo de lo que han asegurado que informarán cuando esté confirmado.