El Ayuntamiento de València tiene previsto solicitar al Ministerio de Hacienda a lo largo del presente mandato la revisión de los valores catastrales de la ciudad que sirven como referencia para definir lo que debe de pagar cada vecino por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), en función de la zona en la que vive.
El concejal de Hacienda de València, Ramón Vilar, ha explicado que se va a solicitar al Catastro, entidad dependiente del mencionado Ministerio, la revisión de la ponencia de valores puesto que la actual lleva 22 años en vigor y está desfasada, tal y como ha avanzado El Mundo.
La revisión conllevará a buen seguro un aumento considerable del recibo del IBI, pero Vilar ha asegurado que de producirse se reducirá el gravamen municipal del impuesto para amortiguar el impacto en el recibo.
De hecho, ha recordado que en los últimos Presupuestos Generales del Estado el entonces ministro Montoro subió el IBI 4 puntos a los municipios que como València no habían actualizado sus valores catastrales en los últimos 10 años, “una subida que este Ayuntamiento progresista neutralizó bajando el tipo municipal”.
La última revisión catastral que se realizó en la ciudad entró en vigor en el año 1997, pese a que lo recomendable es que los valores se actualicen cada 10 años.
En el año 2007, con el PP al frente del Consistorio, hubo un amago de inicio del proceso, pero finalmente se paralizó puesto que el exagerado aumento de los precios de las viviendas hubiera derivado en un desorbitado incremento del recibo del IBI, con el coste político y electoral que hubiera podido conllevar.
Críticas del PP
La portavoz del Grupo Municipal Popular, María José Catalá, ha destacado este lunes que el Gobierno del Rialto está preparando una importante subida de impuestos “porque han disparado el gasto corriente en el Ayuntamiento y porque los presupuestos de los últimos años han estado mal programados y pésimamente ejecutado”.
Catalá ha rechazado rotundamente que el Ayuntamiento pueda llevar adelante una revisión del Impuestos de Bienes Inmuebles (IBI) con subidas que podrían oscilar entre el 3% y el 10%.
“No es momento de subir ni un solo impuesto a los valencianos, porque todos los indicadores dicen que la economía se está ralentizando de manera alarmante y que es urgente reducir al máximo la presión fiscal para no ahogar a los contribuyentes”.
Después de la subida del IBI que afectó a más de 5.000 comercios y despachos profesionales que aprobó el anterior gobierno de la Nau en 2016, el Ayuntamiento incrementó la recaudación por este impuesto en 10 millones.
Por ello, la portavoz popular ha considerado “injustificado que ahora se pretenda llevar adelante una revisión del valor catastral que daría lugar a una subida generalizada del IBI a todos los valencianos” y ha avanzado que solicitará que se baje este impuesto en un 3% a todos los valencianos.