El palacio Valeriola de València avanza como futuro Centro de Arte Hortensia Herrero

La Fundación Hortensia Herrero ha abierto este jueves las puertas del palacio Valeriola por primera vez para presentar el avance de las obras de rehabilitación del histórico edificio que albergará el Centro de Arte Hortensia Herrero. La directora gerente del futuro museo, Alejandra Silvestre, y Jose Martí del estudio ERRE Arquitectura, han mostrado los trabajos de adecuación de un espacio que será una realidad en el año 2023 y que, con una superficie de 3.500 metros cuadrados, acogerá tanto la colección privada de arte de la mecenas Hortensia Herrero como exposiciones de artistas internacionales.

“El Centro de Arte Hortensia Herrero aúna dos objetivos de la presidenta: proteger el patrimonio histórico artístico de la Comunitat Valenciana y promover un espacio dedicado al arte con vocación contemporánea e internacional”, ha destacado Alejandra Silvestre sobre esta iniciativa de mecenazgo cultural que pretende poner en valor la historia contenida en el palacio, pero también convertirlo en un espacio de referencia en València.

Los trabajos que está realizando el equipo de ERRE Arquitectura consisten en materializar y llevar a buen término los dos objetivos marcados por la Fundación Hortensia Herrero en un proceso “laborioso, delicado y exigente”, según ha explicado Jose Martí. La intervención plantea una continuidad natural entre lo viejo y lo nuevo, una continuidad con lo ya construido, “como un episodio más en la historia del edificio”, en palabras del arquitecto quien ha citado como ejemplo que, durante el recorrido museístico, los visitantes podrán disfrutar del arte contemporáneo, descubrir parte del circo romano de València o ver las vigas originales de madera y el revoltón cerámico de la sala noble.

Las obras de rehabilitación arrancaron en el año 2018 y, una vez terminadas las cimentaciones, actualmente se está llevando a cabo la ejecución de la nueva estructura y el refuerzo de los elementos existentes, tanto en el edificio de San Cristóbal como en el volumen del Palacio. Los trabajos finalizarán en el año 2023 aportando a la ciudad de València un centro de referencia para el arte contemporáneo.

Diálogo entre pasado y futuro

A lo largo del recorrido por las obras, los responsables de la remodelación del palacio Valeriola han explicado que se devolverá la fachada a su estado original en su reforma de principios del siglo XIX, se mantendrá el pavimento original de adoquín de rodeno y se eliminarán los elementos impropios modernos que se han añadido en las últimas décadas durante las distintas fases del edificio.

Sobre la capilla del inmueble, el arquitecto Jose Martí ha comentado que “se restaurará y se reconstruirá adaptándola como una sala más del futuro Centro de Arte Hortensia Herrero”. Asimismo, la calle de la antigua judería se respeta como huella del pasado y espacio exterior. El jardín se presenta como una sala más del museo, pero exterior, conviviendo con una clara presencia de elemento verde y de agua. “Es un homenaje al patio árabe que en su momento fue”, ha apuntado.

El recorrido por las obras ha continuado por la andana, el espacio más emblemático, que conservará su carácter con sus ventanas en arco y la cubierta de vigas de madera originales. Finalmente, el mirador se concibe como un alto en el recorrido museístico desde el que se puede contemplar el entorno.

Apuesta por oficios artesanos tradicionales

El proceso de rehabilitación se está llevando a cabo contando con la participación de “un conjunto de artesanos, profesionales, técnicos y arqueólogos”, en palabras de Jose Martí.

Se están rehabilitando las antiguas vigas de madera deterioradas por la humedad y los xilófagos utilizando innovadoras técnicas. Asimismo, se están recuperando los revoltones cerámicos originales que cubren el techo de la sala noble y la monumental escalera que preside la entrada del inmueble, con la colaboración de un especialista en métodos tradicionales de bóvedas tabicadas.

El proyecto conservará el pavimento que reproduce una escena mitológica de Perseo y Andrómeda que formaba parte del palacio. Entre los artesanos que están colaborando, junto con el estudio de arquitectura ERRE, también se encuentra un restaurador que está realizando catas en la fachada para conocer la decoración original, un orfebre que trabajará en la recuperación del portón de la entrada principal o un cerrajero en las barandillas y las rejas originales que cubrían las ventanas. La intervención se aborda desde una perspectiva “conservadora y respetuosa”, ha concluido Jose Martí.

Hallazgos arqueológicos

La Fundación Hortensia Herrero ha mostrado por primera vez los hallazgos descubiertos en la intervención. Los más importantes han sido un horno bajomedieval y los tramos de la gruesa pared de cinco metros de ancho del graderío occidental del circo romano de Valentia, hallados en el patio y datados hacia la primera mitad del siglo II d. C.

En los últimos meses también se ha descubierto la parte superior del cráneo de un caballo que podría ser parte de algún acto ritual, un enterramiento singular de una joven de unos doce años con una botella de perfume que parece datar del siglo III d. C y restos cerámicos de todas las épocas. Hasta la fecha, en el patio posterior del palacio también se han documentado 22 enterramientos en el antiguo cementerio de San Juan del Hospital.

El edificio recogerá ese carácter del legado histórico y la arquitectura contemporánea para el que está siendo rehabilitado. Las excavaciones arqueológicas descubiertas durante los trabajos podrían resumir “la historia de la ciudad: desde la Valentia romana, la época musulmana, la judería medieval o el esplendor de la Ruta de la Seda en el s. XVIII”, según Alejandra Silvestre que ha enfatizado la “coordinación total” entre el proyecto museográfico y el proyecto arquitectónico.

Un diálogo permanente con el que se pretende que el nuevo conjunto arquitectónico responda a las necesidades de los artistas, los comisarios, las obras de la colección Hortensia Herrero y, por supuesto, los futuros visitantes.

De este modo, la Fundación Hortensia Herrero ratifica su “firme compromiso” con la Comunitat Valenciana y sus ciudadanos para hacer realidad un centro de arte icónico que se sumaría así a la tendencia de otras ciudades europeas, que cuentan tanto con museos públicos como con fundaciones privadas sustentadas por mecenas.