Última sesión del juicio a Eduardo Zaplana. La guerra abierta entre las defensas se ha reproducido en el turno de la última palabra de los acusados. El expolítico del PP ha asegurado que no ha cometido “ninguna ilegalidad” durante su etapa de presidente de la Generalitat Valenciana ni ha tenido “nunca dinero en el exterior”. “Lo reitero”, ha dicho. Zaplana, a pesar de los reparos del presidente del tribunal, ha elogiado su propia carrera política. “De toda esta larga etapa, los recuerdos gratos superan a los ingratos”, ha afirmado.
El expresidente autonómico ha lamentado la “difícil etapa” desde su detención en 2018 y ha destacado la “gran satisfacción y orgullo” por sus años de “dedicación a la vida pública y, muy especialmente” al Ejecutivo autonómico. “Para mí fue un honor dirigir también estos equipos de personas que entregaron lo mejor de si mismos en esa etapa”, ha apostillado.
Eduardo Zaplana ha convertido su turno de última palabra a pronunciar una suerte de mitin político, a pesar de las advertencias del presidente del tribunal, el magistrado Pedro Castellano. “Ha sido un honor y un privilegio dedicarme a la vida política”, una “actividad digna donde las haya”, ha dicho.
Su exjefe de gabinete, Juan Francisco García, ha arremetido contra el expresidente valenciano. El acusado, que ha alcanzado un pacto de conformidad con la Fiscalía Anticorrupción, ha desvelado que se reunió con Zaplana antes del juicio para anunciarle que iba a confesar los hechos para obtener una rebaja de la condena. “Le expliqué que estaba iniciando por indicación de mi abogado un proceso de acuerdo de conformidad y de negociación. Como amigo suyo le recomendaba o le sugería que podía hacer lo mismo. No voy a citar literalmente su contestación”, ha relatado.
“Todo lo que declaré es absolutamente verdad, no son interpretaciones”, ha abundado Juan Francisco García. “Desgraciadamente, participé en una serie de hechos que he reconocido”, ha apostillado.
Antes del turno de la última palabra, las defensas de los acusados secundarios han expuesto su informe de conclusiones. El letrado de Francisco Grau, asesor fiscal de Zaplana, ha enmarcado los acuerdos de conformidad de cuatro acusados clave con la Fiscalía Anticorrupción en un supuesto “control de daños”, aunque ha reconocido su “legitimidad”. En referencia al testaferro confeso, Joaquín Barceló 'Pachano', el letrado Bosco García de Biedma ha afirmado que “pactó lo que el Ministerio Fiscal había pedido oír”. Sobre la fiduciaria Beatriz García Pesa, sobrina del famoso espía implicado en el 'caso Roldán', dijo que “se le convirtió en un testigo privilegiado por intereses”.
También destacó que su cliente “no había estado en Andorra”, destino de los fondos de la presunta trama. La defensa de Grau aludió a un “ensañamiento con su cliente ”absolutamente innecesario“. Grau ”está en todo porque es el asesor“ de Zaplana y Pachano, ha alegado el letrado. También ha asegurado que los fondos en Luxemburgo ”no eran ni siquiera dinero negro“, en todo caso era ”dinero blanco“.
La defensa de Mitsouko Henríquez, secretaria de Zaplana, ha expuesto un informe técnico que descarta que fuera miembro de la presunta organización criminal. Su papel se limitaba a tramitar reservas en hoteles o restaurantes y “todo lo que el señor Zaplana le ordenaba”. “Su único delito parece ser haber sido secretaria de Zaplana durante 30 años”, ha afirmado la letrada Carmen Gallego.
De los casi 10.000 correos electrónicos de la secretaria analizados, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sólo cita nueve e-mails que aluden a los hechos. La letrada ha descartado que la secretaria participara en las supuestas operaciones con dinero en metálico y ha destacado que los 50.000 euros en efectivo intervenidos en su despacho eran de su jefe, según los extractos de la cuenta bancaria de Zaplana. Además, no se ha acreditado que se haya incrementado su patrimonio ni ninguna vinculación con las sociedades“ investigadas en el 'caso Erial'.
Por su parte, el letrado Saturnino Suanzes (que se representa a sí mismo) ha negado que sea experto en derecho tributario (ejerce en el terreno penal y concursal) y se ha considerado “alejado” del movimiento de fondos de la presunta trama en Andorra y Panamá y de las adjudicaciones del Plan Eólico y de la privatización de las ITV. Suanzes ha descartado que usara “lenguaje velado” en las conversaciones telefónicas intervenidas por la UCO.
El abogado ha limitado su papel a la asesoría jurídica a Pachano, por recomendación de Zaplana, con quien mantiene amistad. Suanzes ha explicado que no conoce a la “gran mayoría de los sujetos” que se sientan en el banquillo de los acusados. El letrado ha afirmado que el material probatorio expuesto en el juicio “se ha convertido en prueba de la defensa”.
La defensa de Francisco Pérez López, más conocido como 'Paco Gasofa', ha argüido que todos los fondos que entregó a Eduardo Zaplana fueron devueltos por el exministro del PP. En algunos casos el dinero fue adelantado para el pago de yates para Zaplana que, según la defensa, fue devuelto. Sobre la compra del barco 'Loix', el letrado ha afirmado que “no hay nada que sea ilegal”.
El letrado ha descrito a su cliente como un empresario “nativo” de Benidorm, “amante de la navegación con bastantes títulos”, además de amigo “de toda la vida” tanto de Zaplana como de Pachano. La defensa ha explicado que Paco Gasofa no dejó a su letrado negociar un posible pacto de conformidad con la Fiscalía Anticorrupción. “Ha ayudado a dos amigos, es inocente”, ha afirmado.
La antigua “reputación intachable” de Zaplana
La defensa del empresario Robert Edgar Bataouche ha negado que mantuviera una relación de amistad con Eduardo Zaplana y que conociera el origen ilícito de las cantidades usadas para adquirir dos áticos en el puerto deportivo de Altea. El letrado ha destacado que en el sumario no figura “ni una sola” conversación telefónica intervenida por la UCO. “La relación de amistad no existe”, ha dicho.
También ha destacado la “reputación intachable” de Eduardo Zaplana antes de su detención y ha enumerado todos sus cargos públicos y empresariales. Se trataría, según la defensa de Bataouche, de una “trayectoria personal y profesional digna de confianza”, truncada por el 'caso Erial' en 2018.
La defensa del empresario Carlos Gutiérrez Mondedeu ha arremetido contra la investigación de la causa por parte de la UCO, que ha tildado de “investigación prospectiva y con las cartas marcadas”. La letrada ha recordado que las pesquisas analizaron “15 años” de la trayectoria de sus empresas y “no se encuentra nada, ni siquiera ingresos en efectivo”.
También ha acusado de mentir al fiduciario uruguayo Fernando Belhot, uno de los testigos clave de la causa que entregó a la justicia española casi siete millones de euros (de Zaplana, según dijo). En la línea de la tesis de la defensa de Zaplana, la abogada ha sostenido que Belhot se quedó dinero del tinglado societario.