Con las estaciones del otoño y el invierno estamos más recogidos en casa a raíz del descenso de las temperaturas y la llegada más temprana de la noche. En estos momentos, se vuelve muy placentero y reconfortante tomar una bebida caliente en la tranquilidad del hogar. En este artículo os recomendamos estas bebidas calientes -que no son café ni té-, cuya preparación en casa es fácil.
Se trata de recetas que vienen de otras culturas y que estamos empezando a beber cada día más a causa de sus propiedades únicas y su sabor maravilloso.
Chai Latte
El chai es una de las bebidas a base de té más antiguas del mundo, originada en la India hace miles de años y que se ha extendido por todo el mundo. La versión tradicional se elabora a base de té negro con especias como el jengibre, clavo, canela, anís estrellado y pimienta.
A la hora de prepararlo, calentamos agua sin que hierva. Vertemos el agua en una taza hasta la mitad de su capacidad y le añadimos té negro junto con jenjibre y anís y lo dejamos reposar durante tres o cuatro minutos. A continuación se calienta la leche o bebida vegetal y con la ayuda del espumador creamos una ligera capa de crema de leche. En último lugar, mezclamos la leche o bebida vegetal con la infusión que hemos hecho antes. Por último, colocamos la espuma o crema de leche que hemos preparado anteriormente y rematamos la elaboración espolvoreando un poco de canela y le añadimos una pieza de anís.
Las especias utilizadas se pueden comprar en una tienda de café. En algunas tiendas crean sus propias mezclas, mientras que en otras usan un sirope de chai endulzado o un polvo que permite preparar rápidamente la bebida.
Pumpkin latte o café de calabaza
El pumpkin latte o café de calabaza ha llegado como una moda para quedarse en nuestros paladares. Este rico café se puede preparar en casa y de forma fácil. El café de calabaza contiene canela, jengibre, nuez moscada y clavo. Aunque el ingrediente principal es el café, la calabaza le aporta un sabor único.
Para prepararlo necesitamos puré de calabaza, café, especias y nuestra bebida vegetal favorita. En primer lugar hay que disponer de puré de calabaza en un cuenco y mezclaro bien con el azúcar y las especias. Después hay que colocarlo con la leche de vaca o vegetal en un cazo y calentarlo sin que llegue a hervir. Tras ello, se le añade el café recién hecho a la leche y se mezcla. A la hora de servirlo se puede usar un colador por si quedan impurezas y añadirle un poco de nata montda y canela molida, si es de nuestro gusto.
Leche dorada o golden milk
La leche dorada, golden milk en inglés, es una bebida muy saludable que se utiliza de manera tradicional en la India y que consta de jengibre y cúrcuma, entre otras especias, que le dan ese aspecto amarillento o 'dorado'.
Para prepararla hay que calentar la leche en un cazo con una rama de canela, clavos, cardamomo abierto, granos de pimienta y jengibre picado o molido. A continuación hay que bajar el fuego antes de que llegue a ebullición y echar la cúrcuma, removiendo bien, y se deja cocer a fuego muy lento durante al menos cinco minutos. También se puede batir con una batidora de capuccino para que quede esponjoso o servirlo con una nube de leche..
Esta bebida hay que tomarla recién hecha y caliente. Se puede ajustar el nivel de dulzor al gusto y también la cantidad de especias. Si le añadimos bebida de almendras se consigue aún más sabor.
Matcha latte
El matcha tiene todos los beneficios del té verde, pero multiplicados por diez. Los japoneses lo descubrieron hace siglos, pero a occidente llegó hace tan solo unos años. Al prepararse con la hoja molida, se ingiere entera y no solo el agua, como en el caso del té verde convencional.
Este té es rico en antioxidantes. El té verde tiene l-teanina, que ayuda a la sensación de relajación, y, eso sí, sin el subidón de otras bebidas cafeinadas.
Para prepararlo se calienta el agua y la leche vegetal. Después se echa el agua caliente, el té matcha, el sirope y la canela en un bol y se remueve. Lo siguiente es echar la leche en una taza y añadir la mezcla de té matcha y removerla hasta que se integre por completo. El té matcha en polvo se puede encontrar en herbolarios, algunos supermercados y tiendas online. Para que quede más rico se le puede añadir extracto de vainilla y canela molida.
Vino caliente
El vino caliente, conocido en Alemania como Glühwein, es sinónimo de fiestas navideñas en los países del norte de Europa. Tal y como su nombre indica, el vino se calienta y se adereza con una serie de especias y, a veces, con frutas. Aunque los ingredientes exactos pueden variar de un sitio a otro, la mayoría de las recetas incluyen canela, clavo de olor, nuez moscada y cáscaras de cítricos.
Para hacer esta receta hay que calentar suavemente el vino y las especias en una cacerola, pero sin dejar que hierva puesto que se evapora el alcohol. Entonces, se calienta a fuego lento una botella de vino tinto con una naranja cortada en rodajas, ocho o diez clavos de olor, dos palitos de canela y tres o cuatro cucharadas de azúcar. Hay que dejar que el vino se enfríe un poco antes de beberlo para que se mezclen bien los sabores. Solo nos queda beberlo y celebrar la Navidad.